Bahl dijo que fue un encuentro franco donde se plantearon tres temas. Primero la decisión política de avanzar en la incorporación de tecnología electoral. Segundo es el empoderamiento de la Cámara Nacional Electoral para que sea el ámbito donde se homologue la incorporación de tecnología. “No solamente en la primera oportunidad sino también hacia el futuro porque se supone que la tecnología puede ir evolucionando”, dijo. El tercer punto acordado es que lo haga de manera gradual si las condiciones operativas no permiten hacerlo en forma simultánea en todo el país.
Para Bahl, es “positivo”, “auspicioso” y “transmite garantía y seguridad” a los partidos políticos el hecho que sea la Cámara Nacional Electoral porque es el ámbito que tiene la última palabra en materia electoral. “Es mucho más transparente antes que lo haga un organismo del Poder Ejecutivo. Que sea la Dirección Nacional Electoral o cualquier organismo del Ejecutivo puede llegar a generar suspicacia a los partidos que hoy no están en el gobierno”, mencionó.
El vicegobernador también señaló que en el proyecto que se encuentra en el Congreso hay muchos aspectos que se están discutiendo. “Tenemos por delante que esta ley sea sancionada de acá a fin de año. Si no es sancionada a fin de año, va a ser casi imposible implementarla para las elecciones de 2017. Ese es el primer aspecto que hay que superar”, acotó.
Bahl se refirió a las declaraciones del senador entrerriano Pedro Guastavino quien dijo que “dentro del bloque hay mucha preocupación y muchas dudas” respecto del proyecto. El vicegobernador dijo que está todo en discusión. Por ende, ayer no se “punteó un texto y se le dio aprobación al mismo porque no tenemos facultades para eso, para eso está el Congreso”, aclaró. Los senadores “deberán ponerse de acuerdo o no para sancionar la ley. Si no se ponen de acuerdo, seguramente este proceso de implementación quedará para más adelante”, añadió. “Acá hay que diferenciar la adhesión lisa y llana a un texto de ley que nunca tuvimos para discutir a la decisión política de incorporar tecnología electoral”, manifestó.
Respecto del sistema en sí, indicó que si bien el proceso consiste un sistema electrónico, la boleta se va a imprimir, se va a incorporar a un sobre y se va a escrutar para las confecciones de las actas correspondientes. “La Justicia electoral es quien hace el escrutinio definitivo. No estamos apartándonos del método tradicional. No estamos sustituyendo lo que actualmente está”, resaltó.
Cuando uno va a votar tiene que estar todas las boletas. Tenemos los problema muchas veces que los partidos chicos no tienen fiscales y las boletas desaparecen y no están a disposición del elector. En el caso de Entre Ríos hay aproximadamente 1.000.000 de electores y los partidos tienen que imprimir cuatro cuerpos. O sea 4.000.000 de boletas y eso multipliquémoslos por la cantidad de partidos. Es un dispendio económico tremendo”, resaltó.
En cambio, con el sistema propuesto, se utiliza el mismo para imprimir la boleta. “esa boleta entra a un sobre, se escruta ese sobre, se incorpore a un acta, firman los fiscales y finalmente la justicia escruta ese acto. Estamos dando un paso hacia adelante, no nos estamos apartando de sistema tradicional. ¿Dónde está la implementación electrónica? En la posibilidad de imprimir la boleta directamente en ese momento”, explicó Bahl.
Además, Bahl aclaró que no está prevista la incorporación de un chip que envíe el voto electrónicamente hacia una computadora en Buenos Aires. De esa forma, no se pone en riesgo el sistema electoral dejándolo vulnerable al accionar de un hacker. “El sistema de chip es ‘hackeable’ y vulnerable”, indicó.