Votantes macristas que se quedan sin excusas ni argumentos

GONZALEZ  FRAGA

Hace 4 meses, a fines de mayo y en su defensa a la política económica del macrismo, González Fraga soltó: "Las cosas no se pueden hacer como uno querría, y menos después de 12 años donde se ha invertido mal, se alentó el sobreconsumo, se atrasaron las tarifas y se atrasó el tipo de cambio".

Al lado de esto criticó a la gestión de Cristina Kirchner. "Le hiciste creer a un empleado medio que su sueldo medio servía para comprar celulares, plasmas, autos, motos e irse al exterior. Eso era una ilusión. Eso no era normal".

 

PURA SINTORIA FINA : EL FONDO MONETARIO INTERNACIONAL ACABA DE AFIRMAR

El equipo de técnicos del FMI, dirigido por Roberto Cardarelli, se instaló en Buenos Aires el 19 de septiembre para comenzar con las tareas de revisión de la economía y ayer finalizaron la tarea. Antes de irse dijeron… que antes de la llegada de Cambiemos se promocionaba en forma “insostenible” el consumo de la población y se desincentivaba la rentabilidad de las empresas.

O sea, la coincidencia con el economista Gonzáles Fraga no puede ser más elocuente.

Como si fuera poco y copiando la práctica de este gobierno de mentir de modo permanente sobre lo que en verdad ocurre, señalaron sin pudor : “Hay que felicitar al gobierno de Macri por su compromiso para bajar la inflación a niveles de un dígito y reducir el déficit fiscal”.

Es imposible no reparar en que este gobierno hace 9 meses que administra el país y lejos se está de haber resuelto el problema de la inflación que para este año se proyecta hacia un 40 %, es decir casi el doble de la inflación que había dejado el anterior gobierno K.

Para colmo de males, tampoco el gobierno macrista logró reducir el déficit fiscal, al contrario, lo subió, lo hizo más abultado.

Plantearon los técnicos del Fondo Monetario que “al entrar en funciones en diciembre del año pasado, el nuevo Gobierno, los niveles de consumo eran insosteniblemente elevados, la inversión se encontraba en niveles históricamente bajos y los profundos déficits fiscales se financiaban mediante la creación de dinero, lo cual generó altos niveles de inflación”.

Para decirlo de otro modo, los niveles de inversión hoy son sensiblemente menores que los del año pasado y a pesar de los anuncios de lluvia de dólares, de ingreso de divisas vía blanqueo de capitales y del bombo con el que se presentó el cónclave conocido como “mini-davos”, ninguna información veraz es capaz de sostener tales anuncios rimbombantes.

 

LA UNICA VERDAD ES…

Contrariamente a esto, en apenas 9 meses este gobierno aumentó la pobreza (solo de diciembre a junio) en 1.400.000 de pobres ; llevó los niveles de desocupación a un número estimado en poco más de 500.000 nuevos desocupados ; caída del PBI estimada en 4 % si se computa que el año pasado y según datos de este gobierno (INDEC) el crecimiento fue del 2,4 % ; los niveles de consumo deprimidos mes a mes y sin parar desde diciembre ; caída abrupta de la producción industrial ; crisis sostenida de las economías regionales. Por caso y en relación a este último punto, las exportaciones de citrus en Entre Ríos cayeron un 25 % según datos de la misma FECIER.

Frente a esta situación critica los mismos medios que embaucaron al ciudadano intentan tapar el cuadro con títulos sobre supuestos hechos de corrupción del anterior gobierno sin mencionar ninguno de los escándalos de las actuales corruptelas.

Para esa prensa indigna del buen periodismo no existe la complicada situación del presidente Mauricio Macri con la corruptela en los Panamá Papper ni las bolsas de la Vicepresidente Gabriela Miichetti que ya suman varios millones de dólares o sus relaciones nonc-santas con proxenetas dueños de prostíbulos en los que tenían secuestradas a medio centenar de mujeres, que aportaba a la campaña electoral macrista.

Esos medios también ocultan las encuestas y las informacions que elevan la figura de Cristina Fernández de Kirchner, premiada y agasajada en el  exterior y con encuestan en Buenos Aires que la muestran con niveles de aceptación de más del 50 %.  Para tapar ese cada vez más alto nivel de aceptación popular utilizan a dirigentes pegotistas imbuidos de una genuflexión de la que no se sabe como volverán.

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