El vicepresidente del PJ de Entre Ríos fijó posición en un asunto central por estos días de discusión y reposicionamientos en el peronismo: hasta dónde se puede acompañar, desde el PJ, las medidas adoptas por la gestión de Mauricio Macri bajo el argumento de dotar de gobernabilidad a la provincia.
“Creo firmemente que el peronismo debe garantizar la gobernabilidad, en el sentido de promover el normal funcionamiento de las instituciones republicanas y democráticas, no estoy de acuerdo con la idea de oponerme a todo lo que haga el gobierno simplemente porque no sea peronista. Y desde luego que apoyamos la necesidad de nuestro gobernador Gustavo Bordet para establecer acuerdos de gobernabilidad, ya que es él quien está al frente de la administración provincial y quien debe enfrentarse a la problemática de quien día a día debe gestionar para todos los entrerrianos”, aclaró Cáceres.
Sin embargo, cuestionó “los argumentos divulgados por la gran prensa oficialista de que la gobernabilidad se construye cuando los partidos de la oposición acompañan todas y cada una de las medidas que toma el gobierno de Macri, especialmente las políticas de ajuste que violan derechos individuales, sociales y colectivos del pueblo argentino. Así no funciona la democracia, el pueblo a nivel nacional eligió ajustadamente a Macri para que gobierne y al PJ para que sea oposición”, recordó.
“La gobernabilidad –continuó- no es articular un cogobierno cómplice del PJ con Macri, eso es una fantasía del antiperonismo que va contra el más elemental sentido común de la política. Gobernabilidad es garantizar que el Congreso y el sistema político funcionen adecuadamente, donde no se paralice el funcionamiento legislativo y exista un diálogo entre los partidos.
Dialogo maduro debe ser el concepto adecuado donde se encuentren soluciones para todos los actores, tanto para la relación de la Nación con las provincias, al igual que con las intendencias; en lo que refiere a recursos económicos, obras y políticas de Estado, al igual que los acuerdos que partidos y fuerzas políticas deberán construir para sancionar leyes y nuevos proyectos”.
Diputados
Bajo esa lógica, Cáceres criticó a los diputados que la semana anterior se fueron del bloque del Frente para la Victoria en el Congreso de la Nación. “No entiendo lo de (Diego) Bossio, fue alguien que tuvo muchísima protección y protagonismo con Néstor y Cristina, al punto de relegar incluso a gran cantidad de compañeros con décadas de trayectoria y mucha representatividad electoral”, reprochó.
“Pero tampoco creo que haya que demonizar el debate dentro del peronismo –aclaró el dirigente de Paraná-. Si algo le puede hacer daño al PJ es la falta de debate y, además, cuando perdimos las elecciones era natural que se abra un periodo de autocrítica y discusión interna, incluso más allá de las autoridades partidarias propiamente dichas. En mi trayectoria política me ha tocado formar parte de bloques legislativos y nunca dejé de expresarme con total libertad cuando un tema no me gustaba, en especial cuando pensaba que iba en contra de los trabajadores, del pueblo y de lo que entiendo como peronismo”, aseguró.
No obstante, para Cáceres es necesario, por estas horas, “poner en blanco sobre negro las diferencias entre la discusión interna y quienes quieren acompañar lisa y llanamente a Macri”.
Aunque entiende que los diputados deberían haber tratado de zanjar diferencias dentro de su propia bancada, afirma que “se puede entender un debate o crisis interna del bloque, siempre y cuando sea para hacer una mejor oposición, más inteligente, constructiva y seductora para el pueblo en general y para los peronistas también”.
“Puedo entender que existan cuestiones de forma o estilo que divida, o cuestiones provinciales que impulsan a tomar otra postura, algo que tampoco justificaría plenamente ya que es la solidaridad entre los distintos gobiernos provinciales la que debe primar por sobre las operaciones de Macri. Nunca voy a convalidar que “un llamado telefónico” para un supuesto “dialogo moderno” sea motivo para traicionar lo que propusimos en campaña con Scioli-Zanini como candidatos”, advirtió.
A su juicio, sería “ridículo” que se divida el bloque para “facilitarle al gobierno nacional un tránsito sin sobresaltos de sus proyectos represivos, revanchistas y entreguistas, convirtiendo a unos diputados que llegaron por el peronismo como un apéndice del PRO”. A los díscolos, Cáceres cree que en este sentido alcanza con “pedirles que miren como les fue a la gran mayoría del radicalismo, que le sirvió en bandeja su rica historia para solo ocupar lugares de cabotaje”.
“Ya veremos en la práctica cómo se comportan los diputados en general, pero si esto último pasa y se reniega del rol opositor que nos confió la sociedad y se asume un acompañamiento acrítico del gobierno nacional no estaríamos hablando de una interna sino de dirigentes justicialistas que se entregan al gobierno de Macri, como otros que ya lo hicieron”, diferenció.
