"Estamos dispuestos a celebrarla en Viena y a empezar inmediatamente este proceso", dijo De Mistura después de reunirse con Lavrov en Moscú.
Por su parte, el responsable de Exteriores ruso manifestó que su país apoya totalmente la iniciativa del enviado de la ONU y señaló que espera que en los próximos días pueda haber ya una lista de grupos de la oposición moderada dispuestos a sentarse en la mesa de negociaciones.
"Se trata de saber quién pertenece a esa oposición que se dice moderada", subrayó en una conferencia de prensa, y agregó que, confirmado ese punto clave, los convocados "deberían formar parte de las negociaciones que el enviado de la ONU y su equipo están preparando en el contexto del arreglo político de la crisis siria".
Según el punto de vista de su gobierno, todo el espectro de la sociedad siria, incluidos los grupos de la oposición, deben estar representados en la mesa de negociación.
Al respecto, De Mistura subrayó que "los actores regionales y la comunidad internacional deben ayudar a las autoridades sirias y a la oposición a iniciar cuanto antes un diálogo sin condiciones previas".
Afirmó que de eso se trató en las reuniones celebradas la semana pasada en Viena por los ministros de Exteriores de los países involucrados de algún modo en el conflicto.
El enviado de la ONU, por otra parte, coincidió con la posición defendida por Rusia de que el futuro del presidente sirio, Bashar al Assad, solo incumbe a "los propios sirios", que son quienes deben decidir qué Gobierno desean tener, según citó la agencia de noticias EFE.
Ya antes de iniciar el cónclave ambos funcionarios habían opinado en forma coincidente sobre el futuro de las negociaciones de Viena, y la mutua aspiración de sean los propios sirios los que se sienten a negociar sobre el arreglo político de la crisis.
"La tarea de los actores externos (en las conversaciones de Viena) consiste en lograr que las partes se sienten a la mesa de negociaciones", señaló Lavrov.
"El encuentro de Viena tiene un formato casi ideal para acompañar los esfuerzos hacia el arreglo sirio. Estamos interesados en reforzar y desarrollar este formato", añadió, en referencia a las reuniones de la semana pasada entre los ministros de Exteriores de 19 países, entre ellos Rusia, Estados Unidos, Arabia Saudita e Irán.
Por su parte, De Mistura manifestó que "el objetivo es muy simple: los sirios tienen que involucrarse lo antes posible en este proceso (de arreglo político)".
El enviado de la ONU dijo que planea visitar Washington los próximos días "para garantizar el éxito de los trabajos que hemos comenzado".
Desde el pasado 30 de septiembre, Rusia lleva a cabo una campaña de ataques aéreos en Siria a petición del Gobierno de Damasco.
Se trata de la primera intervención militar rusa directa en el país árabe en los más cuatro años el conflicto, que causó más de 250.000 muertos.
Moscú reiteró que sus acciones en Siria se ajustan estrictamente al derecho internacional y que su objetivo es defender el orden constitucional de ese país, habida cuenta de la toma de territorio por parte de los yihadistas del Estado Islámico y de la falta de respuesta que por ahora brindó la coalición integrada por 60 países, entre ellos las principales potencias mundiales.
