Más de 700 periodistas fueron asesinados desde 2006 por ejercer su profesión y llevar la información al público, lo que arroja la impresionante cifra de una muerte por semana de media.
Según informó hoy la Comisión Alemana para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), tan solo en los años 2013 y 2014 fueron asesinados 178 periodistas durante el ejercicio de su trabajo.
"Cada cinco días es asesinado un periodista debido a su trabajo", afirmó Wolfgang Schulz, miembro de la junta directiva de la Comisión Alemana para la Unesco y director de la cátedra Unesco de Comunicacion y Libertad de Prensa en Hamburgo.
Además, se reveló que en nueve de cada diez casos los autores del crimen no son castigados, impunidad que lleva a más asesinatos y que es con frecuencia un síntoma del empeoramiento de un conflicto y del derrumbe del sistema judicial.
Los datos fueron proporcionados por la Unesco en el Día Internacional para poner fin a la impunidad contra periodistas que se celebra este lunes, 2 de noviembre.
La Unesco, que condenó 680 asesinatos de periodistas entre 2006 y 2014, también ofrece datos como que menos del 6% de esos 680 casos de asesinato han sido resueltos; que el 94% de los periodistas asesinados eran hombres; o que el 41% de los periodistas asesinados trabajaba para la prensa escrita, según difunde la agencia de noticias Europa Press.
Según cifras de la Unesco, la región más peligrosa para los periodistas en los dos últimos años fueron los países árabes, en los que fueron asesinados 54 periodistas. En Latinoamérica y el Caribe, en tanto, murieron 51 y en la región de Asia-Pacífico, 30, informó la agencia de noticias DPA.
La directora general de la Unesco, Irina Bokova, pidió a los países que "cuando los periodistas son atacados y asesinados en cumplimiento de sus obligaciones, deben agotarse todos los medios jurídico-estatales".
Al respecto, el organismo advirtió que la impunidad "daña a la sociedad en su conjunto al encubrir unos abusos graves de los derechos humanos, a la corrupción y el crimen".
Por eso pide a los gobiernos, la sociedad civil, los medios de comunicación y a todas las personas implicadas en la defensa del estado de derecho "que se unan a los esfuerzos a nivel mundial para la poner fin a la impunidad".