El Papa llegó al Capitolio acompañado por el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente del Congreso, John Boehner, y brindó un discurso de aproximadamente media hora ante el pleno de los legisladores norteamericanos.
Al finalizar su alocución, Francisco salió al balcón del Capitolio de Washington para saludar a las miles de personas que siguieron desde la calle su histórico discurso: "Agradezco su acogida y su presencia, agradezco a los personajes más importantes que hay aquí, los niños", dijo. "Les pido por favor a ustedes que recen por mí y si hay entre ustedes personas que no creen o no pueden rezar, les pido por favor que me deseen cosas buenas", dijo en castellano y se despidió en inglés: "God bless América".