De acuerdo a los presupuestos ejecutados en los últimos años, la deuda abarca un porcentaje cada vez menor dentro de las cuentas públicas. En 2007, el presupuesto era de $ 87 millones y la deuda consolidada era de $ 13,8 millones y la flotante de $ 2,8 millones. En total, sumando otras deudas menores, rondaba los $ 17 millones. “Era un 19,7 % sobre el total del presupuesto ejecutado”, indicó.
En 2013, frente a un presupuesto ejecutado de $ 436 millones, la deuda consolidada era de $ 16 millones (3,88 %) y la flotante era de $ 15 millones (3,5 %). “El total de la deuda era de $ 33 millones que comprende algunos saldos de algunos fondos afectados que son menores nos lleva a un total de 7,8 % de incidencia de la deuda sobre el total del presupuesto ejecutado”, manifestó Labriola.
Otro ítem analizado fue la recaudación de tasas. Labriola dijo que los recursos propios actualmente rondan el 50 % del total, en gran medida vinculada con el crecimiento de la tasa inmobiliaria debido al mayor valor fiscal que tienen las propiedades. Asimismo, resaltó que cuentan con un fondo para prevenir cualquier inconveniente que pueda llegar a surgir con la coparticipación para cubrir dos meses de las erogaciones inmediatas. “Ante la posibilidad de una dificultad, podemos tener ese respaldo que es un fondo que lo venimos manteniendo”, señaló.
Por último, dijo que el porcentaje de los sueldos en el total del gasto público se mantiene levemente por encima del 60 %. “Se ha ido estabilizando alrededor de un 63 %”, especificó.
