También se destaca el compromiso del sacerdote de Concordia con los derechos humanos durante su sacerdocio, y fundamentalmente "durante los años en los cuales la expresión de estos valores era parte de una lucha noble e inquebrantable, al punto de arriesgar su propia vida protegiendo militantes políticos y sociales perseguidos por la dictadura".
El decreto refiere además que la voz y la lucha del Padre Servín "permitieron la concreción de logros y sueños de los más humildes y hasta en grandes obras comunitarias como en el caso de la construcción de la defensa costera en Concordia, de la que él fue uno de los principales artífice".
"Su deceso resulta una significativa e irreparable pérdida para la entrerrianía toda, sin salvedades, credos ni ideologías", se señala finalmente.