“La Presidenta nos propuso una negociación que solo puede terminar de un modo: más deuda y más pagos por deuda sobre los argentinos”, puntualizó, agregando que “un gobierno verdaderamente popular frente a un fallo que lo empuja al default suspendería los pagos y replantearía todo”.
Para Lozano, el replanteo implica “blanquear la situación fiscal y de endeudamiento, crear una Comisión Investigadora de la Deuda Pública. Con los resultados de la comisión, aquella deuda que haya que pagar deberán establecerse los pagos en función de los objetivos de crecimiento”.
“Definido un cronograma de pagos, hay que hacer un canje que reemplace los bonos actuales por nuevos bonos con legislación local. Definido el horizonte de pagos se establecerá una contribución fiscal extraordinaria sobre los responsables de la fuga de capitales”, detalló. Agregó que “la fuga de capitales en la última década asciende a 90.000 millones de dólares y los activos de argentinos en el exterior superan los 200.000 millones de dólares”.