Armando Gostanián llegó a juicio luego que la Cámara Federal rechazara un planteo de nulidad contra la resolución del magistrado Ariel Lijo. En la causa, en la que también fueron procesados los ex funcionarios de la Casa de Moneda Juan Carlos Kalfaian y Rubén Chorbadjian, y el empresario Jorge Molina, se investigó el supuesto pago de coimas millonarias entre 1994 y 1999.
El delito se habría concretado a través de la adquisición de equipos y repuestos de máquinas numeradoras de billetes a la firma Atlantic Zeiser GmbH & Co. KG., representada en la Argentina por Moligraf SAIC, luego convertida en Acremo SA.
Según constancias del sumario, hubo depósitos de la firma alemana en cuentas bancarias que Gostanian tenía en Suiza. Cuando confirmó la medida de Lijo, la Cámara Federal acotó que "la maniobra habría consistido en elevar los precios de los bienes a adquirir entre un 40 y un 50 por ciento de su valor real".
La Sala II agregó que "una vez efectuados los pagos por parte de la Casa de la Moneda, Atlantic Zeiser depositaba la diferencia en cuentas bancarias predeterminadas". Gostanián también fue procesado por enriquecimiento ilícito, ya que para los instructores de esa causa no justificó la compra de un inmueble en Punta del Este.