Los comerciantes vecinos consultados sólo habían escuchado la versión acerca de lo sucedido ya que no observaron ningún movimiento inusual a la hora mencionada. Sólo alcanzaron a visualizar a los agentes policiales que llegaron poco después a investigar el hecho. A las 20.30 el local estaba iluminado pero cerrado por fuera.
El hecho tiene como antecedente inmediato el asalto que sufrió la joyería “De Ibarra” el 8 de marzo pasado. Esa tarde, varios delincuentes ingresaron armados apuntaron y golpearon duramente a uno de sus dueños para que abra la caja fuerte y luego se dieron a la fuga. Luego los investigadores descubrieron que se trataba de una banda formada por delincuentes que se dieron a la fuga de la ciudad y hallaron en un complejo turístico parte del botín como joyas, dinero en efectivo y una notebook además de armas de fuego y equipos de comunicación de banda corrida.