La pérdida mencionada, según la nota de Trabajo, genera filtración de líquidos cloacales, humedad en las paredes, techo y piso y mal olor. De esa forma, se produce un “riesgo grave e inminente para la salud y seguridad de los trabajadores y de terceros”. Asimismo, desde el gremio aseguran que no funcionan los sanitarios del servicio de Salud Mental.
Por lo tanto, se recomienda: “cortar el suministro de energía, cerrar el acceso del área afectada para evitar la caída o resbalón por líquido derramado en pasillos, desprendimiento del cielorraso (durlock) afectado al personal del hospital o a terceros, reubicar al personal administrativo y profesional a un lugar seguro donde ejerzan la tarea acorde a su desempeño habitual y acondicionar y mantener en condiciones normales el sistema cloacal”.
Desde UPCN denunciaron la situación de inseguridad laboral y sostuvieron que se encuentran ante la negativa, negligencia y despreocupación de las falencias existentes de parte de la dirección del nosocomio. Graciela Chiapas “ha hecho declaraciones públicas acusando a UPCN de falsedad de lo denunciado”. “Frente a esta situación el ministerio dio lugar a las inspecciones correspondientes detectando las irregularidades planteadas por el sindicato”, se menciona en una nota elaborada por el gremio.
La sala de Salud Mental fue reinaugurada en 2010 con la presencia del ministro de Salud de la Nación, Juan Luis Manzur. Se reformaron siete consultorios de especialidades referentes a salud mental, con su correspondiente sala de espera, sanitarios públicos y personal y sector administrativo.
