En otro aspecto central de su alegato, Bastian señaló que además para que se den los presupuestos de la comisión por omisión, el sujeto debe ser consciente de su deber y debe haber posibilidades reales de obrar en consecuencia. Cosa que no se da en este caso por todo la manifestado por los testigos durante el debate; entre lo que cabe recordar el terror que Zapata le tenía a Álvarez, el hecho que ella también fue severamente golpeada cuando el imputado agredió de muerte a sus hijos y la cuestión concreta de que la mujer denunció en varias oportunidades lo que estaba padeciendo y los distintos estamentos del estado no actuaron. Todo eso sumado al hecho que Zapata es una persona analfabeta, lo que la vuelve aun más indefensa a la hora de actuar.
El defensor pidió la absolución de su pupila, y disparó: «el Estado no estuvo nunca, no estuvo para educarla, no estuvo para ayudarla a criar a sus hijos, no estuvo a la altura de las circunstancias para recibir las denuncias que intento hacer y ahora quiere condenarla»