Claudia Azcárate, que es integrante del equipo de coordinación de las TIC explicó que “del corte 2011 se otorgaron netbooks en 132 escuelas y que solo faltan tres establecimientos de los que estaban pautados”.
La etapa 2012 comienza esta semana y las que están en primer lugar son las escuelas preuniversitarias. Si bien las cifras no son oficiales, esta mañana el diario Uno de Paraná publicó como dato propio que se llevan distribuidas unas 61.000 computadoras en todo el territorio provincial.
Según informaron desde el área de las TIC las adjudicaciones se frenaron por “falta de stock” y por retrasos que se generaron en los establecimientos educativos. En su mayoría fueron inconvenientes que se registraron a la hora de completar las planillas.
Ahora ya está todo dado para retomar la distribución y mañana llegarían a Gualeguaychú, Diamante, Paraná y Colonia Avellaneda.
Resistencia
El trabajo con las netbooks, en las aulas, todavía no está teniendo el éxito que las autoridades educativas pensaban cuando se implemento el plan.
“Depende de la escuela, del proyecto, del director. Desde el área de TIC se capacitaron a más 4.500 docentes, muchos de ellos lo hicieron en la modalidad virtual, pero sabemos que todavía hay un déficit”, aseguró Azcárate.
En el CGE están trabajando de forma articulada con la Dirección de Escuelas Secundarias para potenciar la comisión de Resignificación de la Escuela Secundaria Entrerriana y por otro lado, está la línea del Plan Mejora Institucional. A lo que se le suma la asesoría del plan de mejora de tutoría del Plan Conectar Igualdad. En el CGE deslizan que “después queda todo en manos del docente”.
Como se hace desde 2010 cuando llegan las máquinas se instrumenta el dispositivo que denominaron “alfabetización digital”.
En muchos casos los docentes nunca manejaron una computadora y necesitan una rápida capacitación para empezar con el cambio.
Se bloquean las computadoras porque no se utilizan en clases
En las escuelas entrerrianas muchas veces se bloquean las computadoras (por el sistema de seguridad que tienen incorporadas) porque no se encienden durante un tiempo considerable.
Los referentes técnicos de cada escuela, encargados de programar las netbooks, tienen trabajo extra porque por la falta de uso los equipos quedan obsoletos.
Las responsabilidades se reparten tanto en los alumnos como en los docentes. Los educadores no incentivan el uso en clase y los alumnos dejan de llevar los dispositivos.
Las profesoras y los profesores se defienden diciendo que con 35 o 40 alumnos en el curso se hace “imposible” coordinar un trabajo y mantenerlos concentrados en las computadoras.
En el equipo de las TIC destacaron que en las escuelas rurales es en donde se registraron mayores porcentajes de interesados para tomar las capacitaciones. Quizás porque los cursos son más reducidos y pueden realizar un trabajo más personalizado con sus alumnos.
En el CGE no tienen registros de qué materias son las que más conectadas están con las nuevas tecnologías. Por otro lado confirmaron que el problema “no es generacional”. Los docentes jóvenes muchas veces saben manejar las redes sociales pero son reacios a enseñar con las computadoras. En contrapartida también hay profesores mayores que se metieron de lleno en los programas. Claudia Azcárate evidenció que “algunos autores aconsejan pasar de las TIC a las TAC. Es decir a la Tecnología del Aprendizaje y el Conocimiento”.
“Lo bueno del uno a uno es que el espacio del aula no se restringe sino que se puede enseñar en cualquier lado. Se pueden mandar trabajos por correos o publicarlos en una Red. Podés tener contacto con el alumno todo el tiempo”, destacan desde el equipo que coordina las TICs.