El gobierno entrerriano trabaja en la formulación de políticas en las que el recurso humano tiene un lugar protagónico para el desarrollo de economías basadas en el conocimiento. Para ello, la Subsecretaría de Ciencia y Tecnología gestiona distintas formas de financiamiento para la repatriación de científicos y tecnólogos en el exterior.
De esta manera, dispone de las herramientas de gestión para subsidios de retorno y las estructuras para tramitar proyectos de Investigación y Desarrollo para la Radicación de Investigadores (Pidri) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (Anpcyt). También cuenta con información de becas de reinserción al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
Es decir, desde el gobierno provincial se está trabajando en viabilizar cada una de las líneas que propone el programa Raíces que lleva adelante el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación para avanzar en el desarrollo de sistemas regionales de innovación.
La subsecretaria de Ciencia y Tecnología, Luisina Pocay dijo “podría ser un recurso de alta importancia para desarrollar economías basadas en el conocimiento. Es parte del fundamento del programa Raíces y de lo que Entre Ríos se hace eco en cada una de las gestiones que realiza”.
Desde 2003, Raíces logró el retorno de 820 científicos al país de los 6.000 que se estiman que están fuera de Argentina.
LOS QUE REGRESARON
Pablo Guerenstein es investigador del Conicet en Diamante y profesor titular de la Universidad Nacional de Entre Ríos en Oro Verde. Actualmente está trabajando, -en colaboración con Alemania-, en un proyecto que desarrolla trampas para mosquitos del dengue; en otro que lucha contra pestes de cultivos de maíz; y un tercero sobre dispositivos que atrapa vinchucas migrantes. Todas estas investigaciones se hacen en Entre Ríos.
Gabriela Müller, licenciada en Ciencias de la Atmósfera, hace un tiempo decidió volver a su tierra natal que es Diamante. No lo hizo puntualmente en el marco del programa Raíces, pero sí con diversas líneas que ofrece el Estado.
“Regresé luego de estar un año trabajando en Goddard Institute for Space Studies (GISS) de NASA, financiado por el Conicet a través de un Programa de Becas para Jóvenes Investigadores.