La cifra total que se registra en el hospital de cabecera de la ciudad, es de un promedio de veinte pacientes abortivas por mes, pero se discriminan entre abortos espontáneos e inducidos, generalmente por este fármaco.
Pero eso no es todo, la misma fuente reveló a DIARIOJUNIO que las edades de estas pacientes van desde “los 13 a los 35 años” y que “casi siempre las pacientes quedan con secuelas o comprometen su salud por usar mal la medicación, o por abortos parciales”.
En cuanto al caso de la adolescente Milagros Lezcano, quien murió el pasado 8 de septiembre a causa de un aborto clandestino que le produjo una infección generalizada, la misma fuente dijo: “Hacía más de tres años que no veíamos un aborto como éste, con la brutalidad que se lo hicieron, se ve que usaron una aguja de tejer o un alambre, porque le dañaron todos los órganos” asimismo, acotó que en el Masvernat “se ven muchos casos, pero ya no son como este, sino que son con Oxaprost, que es menos riesgoso para la mujer que las agujas, pero que sigue siendo muy peligroso”
De más está decir que el Oxaprost (nombre comercial), es un medicamento y como tal requiere de la prescripción y supervisión del un medico especializado, pero más allá de ello, lo que ocurre es que “el fármaco por si solo no es abortivo, sino que es usado como un complemento, pero siempre el profesional realiza la tarea de raspado porque quedan restos, y si no son extraídos se infectan”.
ADVERTENCIAS DEL LABORATORIO SOBRE EL USO DE ESE MEDICAMENTO
Según la pagina oficial de Laboratorios Beta, fabricante de este fármaco, el Oxaprost está compuesto por “Diclofenac Sódico 50 mg; más Misoprostol estabilizado al 0.5% (equivalente a 200mcg de misoprostol) 40.40 mg” y su uso terapéutico es como “Agente antiinflamatorio, analgésico, antipirético, no esteroide (AINE), fármaco inhibidor de la secreción ácida gástrica y citoprotector de la mucosa gastroduodenal”
Asimismo, aclara el prospecto en un apartado de PRECAUCIONES Y ADVERTENCIAS: “NOTA ESPECIAL PARA LAS MUJERES: Este medicamento puede inducir la interrupción del embarazo, por lo tanto, si usted está embarazada no lo debe usar. Las interrupciones en el embarazo causadas por el misoprostol pueden ser incompletas. Esta situación puede tener serias complicaciones médicas llegando a requerir hospitalización y cirugía, cuya consecuencia podría llegar a ser la infertilidad. Si usted cree que está embarazada no tome misoprostol. (…) Si usted está tomando misoprostol y se embaraza, deje de tomar el medicamento y consulte a su médico”
Además señala como EFECTOS ADVERSOS que “se ha descripto la aparición de malformaciones congénitas en niños de madres que han ingerido misoprostol durante el primer trimestre del embarazo. La diarrea y el dolor abdominal son efectos adversos moderados y que se han observado frecuentemente (13 – 40% de los pacientes). En algunas pacientes pueden producirse alteraciones menstruales. (Entre otros)
ESTE MEDICAMENTO DEBE SER USADO EXCLUSIVAMENTE
BAJO PRESCRIPCION Y VIGILANCIA MÉDICA Y NO PUEDE REPETIRSE SIN NUEVA RECETA MÉDICA
HECHA LA LEY, HECHA LA TRAMPA
Pero al ser el aborto una actividad penada por la ley, tanto para el médico que la practica como para la mujer que se somete al mismo, e incluso para quienes colaboren o lo faciliten, estas cosas se hacen siempre en la oscuridad, en la clandestinidad, lejos de cualquier seguridad para la mujer, y a menudo quienes lo practican no tienen nada que perder, ni siquiera una licencia médica, porque no lo son.
Pero si algo ha quedado claro, es que a pesar de todo se hace, existe, y es una realidad, una realidad cruda que pone en riesgo la vida de casi 200 mujeres al año solo en Concordia, y 500.000 en todo el país.
Es así como las mujeres que llegan con serias infecciones o cuadros hemorrágicos severos al hospital, a menudo después de varios días de haber aguantado el dolor y los síntomas -lo más posible- por temor a ser descubiertas y reprendidas, resultan ser casos de abortos con Oxaprost, generalmente mal administrado, y sin ningún tipo de control médico.
Según consignó esta fuente confidencial a DIARIOJUNIO este fármaco “se vende con receta, cuenta $350 la caja, pero algunos farmacéuticos se las venden sin receta y nadie controla”
Y eso no es todo, la “pastillita mágica” que por supuesto no lo es, se vende también por Internet y hasta tiene anuncios en MarcadoLibre y su propia pagina en la Web. En algunos casos, los vendedores se hacen pasar por médicos, y hasta ofrecen un manual que explica como usarlo, exponiendo a estas desesperadas jovencitas a un peligro mortal.
Lo increíble, es que este “manualcito abortivo” de “hágalo usted misma” también puede encontrarse en varias páginas de Internet de interés general o de “Tips femeninos” por ejemplo junto a concejos sobre maquillaje o moda de vestir.
Y aunque en estas páginas se advierte: “El tratamiento con Oxaprost se debe realizar entre la séptima y la novena semana de embarazo” y que existe “riesgo de sufrir una hemorragia abundante” nada dice al respecto de que, no es aconsejable hacerlo sin la supervisión de un médico y de cuales son sus efectos adversos.
LA PASTILLA PRODUCE NÁUSEAS, VÓMITOS, DIARREA Y PÉRDIDA DE SANGRE, QUE PUEDEN DURAR ENTRE 12 Y 24 HORAS.
Pero fundamentalmente el riesgo más grave es que no se puede garantizar que el aborto sea completo, y cuando eso ocurre –que es en la mayoría de los casos- la mujer se encuentra lejos de un centro de salud donde la puedan tratar y a menudo evita concurrir al mismo por temor.
Otro aspecto que vale la pena aclarar es que si bien en obstetricia, en ocasiones se utilizan dosis menores de Misoprostol para inducir el parto, cuando la madre no tiene contracciones o dilatación, éste se da en otras proporciones.
MALFORMACIONES EN LO BEBES
Otro de los efectos que tiene el abuso de este fármaco con fines abortivos, es que si por alguna razón la madre se arrepiente y decide continuar con el embarazo, las malformaciones en el feto son irreversibles.
«EDUCACIÓN SEXUAL PARA PODER ELEGIR, ABORTO LEGAL PARA NO MORIR»
Como ya concluyera en los dos primeros informes al respecto de esta problemática, seguramente nadie, ninguno de los lectores de este articulo, e incluso su autor, están a favor del aborto, ya que este es -al fin y al cabo- una salida desesperada y poco feliz, por la muerte del feto y por la situación que le toca vivir a la madre, sumado a las complicaciones en su salud. Y por sobre todas las cosas, porque es evitable, porque hay métodos de prevención para evitar un embarazo no deseado.
Sin embargo, hay una realidad; -porque siempre la hay- y eso nos supera, supera cualquier previsión del hombre, supera en términos de urgencia a los más trabajados ideales y conceptos.
Es cierto que existen métodos para evitar en embarazo, es cierto que existe la píldora del día después, y es también cierto que por ley el Estado debe garantizarle a cualquier ciudadano información y elementos para una mejor planificación familiar.
Pero pese a todo eso, también es cierto, y es una realidad palpable, que se siguen practicando abortos, y que siguen muriendo mujeres por esa causa, y otras tantas sufren graves consecuencias.
Para ser preciso, ocurre en la Argentina un aborto cada 8 minutos, son 500.000 al año. Y en Concordia al menos unas 200 mujeres llegan al hospital cada año con indicios de haberse inducido el aborto con fármacos que no deberían venderse sino por prescripción médica.
También es cierto que desde que este tipo de abortos desplazó a las viejas agujas de tejer, y a los tallos de perejil, se redujo sensiblemente el número de mujeres que morían por esta causa.
Aunque esta cifra siga siendo alta, precisamente porque la interrupción se realiza de forma precaria, con mala información, sin la supervisión de un médico, y sin las prestaciones de seguridad médica que puede brindar un Hospital.
En otras palabras, a pesar de su ilegalidad, es un hecho que a medida que la técnica se acerca a las prácticas médicas, se reducen las cifras de muerte, con lo que si el aborto no estuviera penalizado, y pudiera realizarse en los hospitales, dejarían de morir tantas mujeres.
Es cierto que despenalizar el aborto no hará nada por salvar la vida de los seres que aún no han visto el mundo, aquellos a los que la ley considera Personas Por Nacer, y que también tiene derechos.
Pero no es menos cierto que mientras no hacemos nada, y seguimos de brazos cruzados, además de esas vidas, que de todas formas se siguen extinguiendo porque los abortos siguen existiendo, también están muriendo sus madres, por no contar con la posibilidad de interrumpir su embarazo con todas las garantías sanitarias y médicas que el Estado puede brindar.
Es Decir, la despenalización del aborto, es un reclamo a que tiene como fin fundamental, salvar vidas; las vidas de esas mujeres que mueren todos los días porque no tienen la opción de abortar su embarazo en manos de un profesional.
Si queremos salvar más vidas, empecemos por ahí, simplemente porque es lo más fácil de hacer, lo que más rápidamente surtirá efecto al menos reduciendo una parte de las defunciones, que ya es bastante.
Y si, por supuesto que la tarea no culmina ahí, también hay que profundizar y garantizar la universalidad y efectividad de la educación sexual y concientización sobre los métodos anticonceptivos, para evitar los embarazos no deseados.
Este criterio se resume en el práctico grito de reclamo “EDUCACIÓN SEXUAL PARA PODER DECIDIR, ABORTO LEGAL PARA NO MORIR”