Por otra parte, dijo que desde el punto de vista personal, “tengo una buena amistad y relación excelente con Amado Boudou, y considero que es un complemento justo para la Presidenta”.
“Fue una elección basada en la lealtad y la competencia técnica de un hombre”, resaltó Urribarri. “Creo que es una gran señal para la política. Repito, es la señal de que el puente generacional de la política ha comenzado a funcionar. Es una gran alegría para mí y debe serlo para una generación de jóvenes”.
Finalmente, subrayó que con la designación del compañero de Cristina, “seguiremos trabajando, ahora de cara a las elecciones, para que la Presidenta gane con la mayor amplitud y confirmemos que el pueblo argentino quiere más crecimiento y justicia”.