“Me parece importante que las empresas puedan aportar a este cuerpo una cantidad de información que no hemos tenido”, dijo la presidente del bloque de concejales del PJ, Marcela Sbresso. El pedido de informes incluyó: cantidad de autos por cada empresa de remises, el modelo de cada automotor, el monto que pagan de “base”, los nombres de los propietarios, si los manejan su dueños o hay choferes a cargo del móvil, el nombre de los choferes, la inscripción laboral de cada chofer y el certificado de inscripción en las ART.
Sbresso recalcó que necesitan la información porque el Concejo se comprometido con la temática del trabajo informal. “Entre las charlas que hemos mantenido en estas semanas se ha manifestado fuertemente que si este Concejo Deliberante autorizaba una suba, esta suba no iba a ir para los choferes y que le estábamos dando un premio a uno de los sectores que más trabajo en negro tiene”, señaló en el recinto.
Incluso, la titular del bloque oficialista pidió que la información requerida sea suministrada como condición previa a concretarse el segundo aumento, previsto para el 31 de diciembre. La moción generó algunas resistencias de parte de otros ediles al punto que terminó desvinculándose una cuestión de la otra y aún así no fue votada por unanimidad, a diferencia de los artículos anteriores. No obstante, la posibilidad de revisar la suba autorizada hoy en base a la presentación o la ausencia de la información será tarea de los próximos ediles.
Por lo pronto, viajar en remisse será más caro. La bajada de bandera subió de $ 4 a $ 4,80 mientras que el costo de la cuadra recorrida también sufrió un incremento, de $ 0,25 a $ 0,30. En tanto, el 1º de enero de 2012 la bajada de bandera se iría a $ 6 de no surgir algún imprevisto.
Los propietarios de remises observaron la sesión desde la bandeja superior del Concejo. Al finalizar la misma, manifestaron su satisfacción con lo sancionado. “Era lo que estábamos pidiendo, a nosotros nos representa un aumento del 20 %”, dijo Lucas Guerrero, propietario de un vehículo. No obstante, el requerimiento de información no generó el mismo sentimiento. “Está bien que se blanquee pero no le corresponde al Concejo Deliberante controlar quien está en blanco, quien está en negro y no pueden poner como castigo o premio una suba de tarifas si hay alguien que no cumple”, añadió Guerrero.
Otro propietario de un remisse, “Cacho” Ruiz, dijo que las expresiones de Sbresso estaban “fuera de lugar”. “Es como la municipalidad, los tipos que están contratados. En realidad es un trabajo en negro también”, acotó. Además, indicó que la mayoría de los choferes de remises son propietarios “pero también hay gente que quedó excluido del sistema. Gente con 45 años que no tiene otro laburo”. Al mismo tiempo, señaló que si se debería blanquear a todos los choferes, la tarifa debería valer “$ 10 o 15”.
“El 90 % somos todos propietarios y de un auto que es con lo que vos subsistís. Entonces hay un 5 % que tenga dos autos, tres, que puedan llegar a tener chofer. Aparte el Concejo no está habilitado para hacer control de policía, para eso está el Ministerio de Trabajo, la AFIP para controlar si hay trabajo en negro, si hay evasión”, dijo Jorge, otro propietario de un remisse.
En otro tramo de la sesión, Sbresso se preguntó acerca de la prórroga de la vigencia de los vehículos que, por antigüedad, debían dejar de trabajar pero se les otorgaba uno o dos años más de plazo. “¿Cuántos de esos remises pudieron en ese año llegar a cambiar el modelo de remisse o de taxi?”, se preguntó. Se trata de otro de los temas relacionados con la situación del sector que está pendiente de tratamiento. Los temas tarifarios son los que más urgen tratar en el Concejo, lo demás puede esperar.