El titular de la cartera agropecuaria participó en el Palacio Municipal de Bahía Blanca de un acto con agrupaciones políticas y organizaciones sindicales donde habló sobre las medidas adoptadas para la región del sudoeste bonaerense en el marco del lock out dispuesto por la Mesa de Enlace agropecuaria.
Acompañado por el secretario de Emergencia Agropecuaria, Haroldo Lebed, y los intendentes de Bahía Blanca, Cristian Breitenstein; de Tornquist, Gustavo Trankels, de Coronel Rosales, Hugo Starc, de Monte Hermoso, Alejandro Dichiara y de General Lamadrid, Juan Carlos Pellita, afirmó: «Yo aspiro a ser el ministro que pueda colocar a Argentina en el escenario mundial de los alimentos, de la participación económica y de un crecimiento sin precedentes».
Al referirse a la protesta desarrollada el miércoles pasado en esta ciudad por las entidades que componen la Mesa de Enlace agropecuaria, el funcionario ironizó: «De un pelo puede hacer que nazca una peluca».
«Como yo quiero ser parte de la solución vengo a rendir cuentas de lo que hice, y me parece que no contribuye en nada que transmita una opinión política sobre las características de los dirigentes gremiales», agregó el ministro.
En ese sentido, Domínguez explicó: «Me toca trabajar para resolver los problemas, por eso hemos tomado las cinco medidas que acordamos hace 30 días en la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca». El ministro recordó que «se pidió la liberación del saldo exportable, y el segundo día de la segunda semana de enero abrimos todo el saldo exportable».
Además, Domínguez expresó que «hemos asignado un cupo de 500 mil toneladas para la región, y esperamos que cuando termine el cese de comercialización dictada por las partes se pueda iniciar rápidamente un proceso de comercialización».
Domínguez dijo también que «cuando liberamos el total del saldo exportable se vino el cese de comercialización. Cuesta entenderlo, no forma parte de ningún manual de negociación gremial», indicó.
A su tiempo, el titular del INTA, Carlos Casamiquela, consideró que el «lock out» patronal que lleva adelante la Mesa de Enlace se centra «en la problemática de la actividad pampeana, pero en el país otros sectores del agro continúan desarrollando sus tareas».
Respecto del cese de comercialización del trigo que se cumple desde el pasado lunes, consideró que «probablemente esté asociado a alguna toma de posición política, sin embargo digo que hay un paro patronal importante, pero en muchos lugares del país se trabaja».
El titular del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) aseguró que el mediano productor de trigo -mediana superficie y mediano rendimiento- tuvo este año una rentabilidad que supera en 40 por ciento, la media histórica del sector.
Por último, Casamiquela precisó que «la cosecha de este año es el doble de la de 2009, sin embargo aparecen algunos reclamos vinculados al precio de comercialización, que no se visualizan claramente porque este año hay 14 millones de toneladas, el país consume 7 millones, es decir que la mitad es saldo exportable».