Dri –oriundo de Chajarí– fue capturado en diciembre de 1977 en Uruguay y luego pasó por un periplo que lo llevó a varios centros de detención clandestina incluyendo el de Rosario –conocido como Quinta de Funes– donde encontró a 14 detenidos hoy desaparecidos, a Tulio Tucho Valenzuela y a agentes de inteligencia que forzaron a algunos a viajar a México.
Valenzuela y Raquel Negro –ambos desaparecidos– son los padres de Sabrina Gullino, nacida en cautiverio en el hospital Militar de Paraná en 1978 que recuperó su identidad en diciembre de 2008.
El 19 de julio de 1978 Dri se escapó a Asunción, Paraguay. Sus captores clandestinos, enviaron desesperadas peticiones a sus pares en Paraguay y dejaron pistas sobre lo que vio Dri durante esos ocho meses.
Un informe del 21 de julio de 1978 del Estado Mayor General del Ejercito de las Fuerzas Armadas Paraguayas, encontrado en el Archivo del Terror, dice que han recibido un pedido de búsqueda de una agencia secreta argentina por Jaime Dri quien «se escapó de las Autoridades Argentinas de Pilcomayo, Argentina» hacia Paraguay.
El pedido de Argentina incluye un prontuario de dos páginas sobre Dri donde claramente establecen que: «De regreso de México, la comisión oficial que acompañó a ‘TUCHO’ le hizo saber a DRI JAIME ‘Pelado'» noticias de México. ‘TUCHO'» Valenzuela, fue uno de los secuestrados sacado de la Quinta de Funes y forzado a viajar con los agentes de inteligencia, pero una vez en México desbarató la operación y la denunció públicamente.
El informe descubierto por Carlos Osorio, director del Proyecto de Documentación del Cono Sur del National Security Archive, en el Archivo del Terror del Paraguay, fue presentado este lunes ante el Tribunal Federal Nº 1 de Rosario, donde se enjuicia a agentes del destacamento de inteligencia 121.
La causa Guerrieri, por el nombre de uno de los imputados, trata de la detención ilegal y posterior asesinato de 14 insurgentes Montoneros en un centro clandestino de detención de Rosario. Los prisioneros habrían sido testigos y forzados a colaborar en lo que se conoce como Operación México, un escuadrón de inteligencia militar enviado a Ciudad de México a liquidar a la cúpula de Montoneros en enero de 1978.
Los documentos de Paraguay se complementan con la media docena de otros publicados en enero de 2008 por el National Security Archive provenientes de la Dirección Federal de Seguridad de México (DFS) que dan cuenta que la DFS capturó e interrogó a dos de los agentes secretos argentinos y los expulsó de vuelta a su país.
«Los nuevos documentos concluyen una triangulación de evidencia documental internacional sobre Operación México y confirman la veracidad del testimonio de Dri que por años, fue conocido solamente por el libro Recuerdos de la Muerte (de Miguel Bonasso)», dijo Osorio.
La NSA publicó en si sitio de Internet los documentos centrales provenientes del Archivo del Terror acompañados de otros 12 de Estados Unidos, Argentina y México, que verifican la solidez de la historia aparecida en el libro Recuerdo de la Muerte.
Paso a paso, los documentos presentan una narrativa que calza perfectamente con el testimonio de Dri: su captura y herida en Uruguay, su traslado a la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA) en Buenos Aires y luego Rosario, el haber sido testigo de Operación México, estar nuevamente en la ESMA y haberse escapado a través de Asunción Paraguay.
Un informe de la Embajada de EE.UU., por ejemplo, informa que Dri fue «detenido cerca de Montevideo el pasado 15 de diciembre» y entregado «solapadamente a las autoridades argentinas» en 1977.
Por otra parte, un documento secreto de una agencia de inteligencia argentina informa que en julio de 1978 «se escapó de un Taxi camino a Itá Enramada [Paraguay] de su custodia».
Luego de escapar a Paraguay, Dri se refugió en la Embajada de Panamá, país de origen de su esposa y donde finalmente se radicó.