Como cada año, la celebración abarca, a lo largo de varios días, actividades culturales, deportivas, espectáculos populares y ceremonias oficiales.
En esta oportunidad los festejos comenzaron la semana pasada, se extenderán hasta hoy, y se reanudarán la semana entrante, pues, por primera vez, la fecha quedó dentro del marco de las elecciones nacionales, y las autoridades decidieron no mezclar las actividades en un ambiente de campaña.
A lo largo de estos últimos días se eligió la reina y las princesas que representarán a la ciudad, hubo carpas con exposiciones y shows musicales, muestras de arte, obras de teatro y ceremonias de recordación.
Hoy la cita será a las 10.15 en la intersección de Tomás de Rocamora y bulevar Los Constituyentes, allí está emplazado el monumento al fundador, y en ese lugar se congregarán las autoridades, representantes de organizaciones locales y alumnos de distintos establecimientos para rendir homenaje. El único orador será el intendente de la ciudad, Marcelo Bisogni.
Para hoy también estaba prevista la oficialización del nombre de Carlos María Scelzi al nuevo auditorio municipal, como así también la presentación del Plan Maestro de Agua y la nueva Costanera de la Isla del Puerto, dos proyectos que tienen aprobación para su construcción y cuyas obras demandarán más de 15 millones de pesos.
Sin embargo, fue el intendente quien decidió postergar ambas actividades para el 8 de julio y no enmarcarlas dentro de los días previos a la elección del domingo.
Al mediodía la celebración se trasladará al hogar de ancianos municipal, donde habrá un almuerzo con los residentes y una fiesta para todos los presentes.
Por la noche el teatro español se dará cita en el auditorio central de la ciudad para ofrecer la obra Contadoras de garbanzos.
Realidad activa. Concepción y concepcioneros, o Uruguay y uruguayenses, los mismos habitantes de la ciudad parecen utilizar ambos nombres y gentilicios de forma indistinta, lo cierto es que esta ciudad de casi 80.000 habitantes sabe distinguirse con nombre propio en cualquier ámbito.
Con cuatro universidades nacionales y decenas de colegios secundarios y terciarios, la vida estudiantil de Concepción es uno de los atractivos para los miles jóvenes de toda la provincia y de la región, que llegan a esta ciudad para formarse y tener una carrera. Los chicos llegan incluso de ciudades de la República Oriental del Uruguay, con quien mantiene estrechos lazos de cooperación e integración real.
Si bien la actividad industrial de la ciudad está diversificada en distintos rubros, indudablemente la industria avícola es el eslabón más fuerte de la cadena laboral que se genera en toda esta parte de la provincia.
Con una faena cercana a los 400.000 pollos diarios, los frigoríficos de la ciudad dan trabajo de forma directa a más de 4.000 personas que desarrollan actividades a lo largo de todo el día.
A todo esto hay que sumar la mano de obra que gira alrededor de estas plantas de faena, y que involucra a cientos de granjas, transporte, sanidad, fábricas de alimentos y provisión de servicios para cada punto de la cadena de valor.
Más de la mitad de los pollos que diariamente se consumen en la Argentina provienen de esta ciudad, y esta cifra se incrementa en otro 15% si se suma la región circundante.
El turismo es también uno de los valores centrales de la actividad comercial uruguayense. Con eje en los atractivos naturales que ofrecen sus enormes playas, con el balneario Banco Pelay como su mayor exponente, esto se complementa con la rica historia que gira en torno de la gran cantidad de monumentos nacionales y lugares históricos que se pueden recorrer.
El Palacio San José es, sin dudas, el punto más alto de la atracción turística interesada en la historia, y a esto se agregan los lugares casi míticos de la formación entrerriana, como la misma Plaza Ramírez, lugar del Pronunciamiento de Urquiza contra Rosas, el Colegio Superior del Uruguay, donde estudiaran los presidentes Roca y Frondizi, o la Basílica Inmaculada Concepción, donde está el mausoleo que guarda los restos del general Urquiza.
La ciudad que fue la capital de la provincia de Entre Ríos durante 23 años
Cuna de los caudillos Pancho Ramírez y Justo José de Urquiza, Concepción del Uruguay fue el centro de operaciones para los preparativos de las luchas que buscaron, primero la libertad, a través del sable y las montoneras de Francisco Ramírez, y más tarde la organización del país por medio del Ejército Grande y las decisiones políticas de Justo José de Urquiza.
En ese marco, la ciudad adquirió un protagonismo que hizo que por estas calles, y por el Palacio San José desfilaran las principales figuras de la historia argentina. Como aliados, como enemigos, de paso o asentándose, Belgrano, Sarmiento, Alsina y otros tantos hombres conocieron esta ciudad porque desde aquí se planificaba la Nación.
Concepción del Uruguay fue capital de Entre Ríos entre 1860 y 1883, período que fue de gran prosperidad para la ciudad.
Sancionada la Constitución nacional el 1° de mayo de 1853, meses después Urquiza fue electo presidente de la Confederación Argentina, pero como Buenos Aires estaba fuera de esa confederación se federalizó la provincia de Entre Ríos y se designó como capital nacional a la ciudad de Paraná.
En ese contexto, cuando se san-cionó la Constitución de Entre Ríos, en 1860, fue designada como capital provincial la ciudad de Concepción del Uruguay.
En 1864 y 1871 hubo dos intentos por tratar de trasladar nuevamente la capital a Paraná, instancia que finalmente tuvo éxito en 1883.
Durante el debate por la reforma de la Constitución provincial en 2008, un grupo de uruguayenses propuso, sin éxito, una reparación histórica para la ciudad por haber sido despojada de la capitalía.
Hoy la ciudad no tiene sedes administrativas importantes del gobierno provincial, y la administración pública se trasladó de lleno a la otra orilla de la provincia.
Fuente: UNO