“Nuestra postura es la más coherente y más seria de cara a estas elecciones, a pesar de las tergiversaciones sufridas en esta campaña”, indicó Iparraguirre, afirmando que es un hecho “que se constata con un fuerte acompañamiento de diversos sectores de la sociedad los cuales expresan un gran cansancio de las actitudes mezquinas de la política”.
Lamentó el referente de la Liga Argentina por los Derechos Humanos que “pocos se han animado a pronunciarse por aquellas cosas que valen la pena rescatar”. Entiende Iparraguirre que “es absolutamente irracional entender que si sos oficialista se tomen posturas extremas donde todo lo que haga el gobierno está bien”, de la misma manera que “si sos opositor, lo políticamente correcto es pegarle al oficialismo, dejando de lado medidas tan importantes como los avances en lo relativo a los DDHH, los nombramientos en la Corte Suprema de Justicia, la nacionalización de las AFJP, la reestatización de Fabricaciones Militares y de Aerolíneas Argentinas, el contexto de integración Latinoamericana, o lo que marco todo el escenario político, el conflicto desatado en torno a la Resolución 125”.
Señaló que “estas posturas pragmáticas e irracionales, en un arrebato opositor, llevaron a socialistas y radicales junto a la candidata del Frente Justicialista Entrerriano a votar en contra de que el Estado regule con mayor decisión en la exportación de granos y la expansión de la sojización trasnacional”
Ante ello, interpreta que “lo que no existe es progresismo, ni diferencias políticas profundas entre los candidatos de cara a este 28 de junio”.
Iparraguirre observó que “todos juntos: socialistas, radicales-corporativistas, derechas varias, y otros hacían fila buscando la bendición de De Angelis para estas elecciones, en momentos donde este personaje declaraba impunemente que a los “peones” había que subirlos en camiones y decirles a quien votar; parece que ninguno quería quedar afuera de la neo restauración conservadora”.
Frente a ello “dejamos claro que no es lo mismo ni lícito llegar a cualquier precio, avalar o hacerse el distraído frente a las aberraciones de la derecha, que indignarse y denunciarlo, aunque esto tenga un costo electoral”, dijo el candidato.
Subrayó además que “nuestra postura no es ni fácil ni cómoda”, evidenciándolo en que “sectores vinculados al bustismo no titubean en mentir intentando desprestigiarnos, o violan códigos éticos de la política utilizan nuestra música de campaña en un programa radial a favor de la lista 501, en una clara estrategia para confundir al electorado”.
Expresó que “frente a tanta mentira y confusión seguimos creyendo en la política como herramienta de cambio, para dignificar a los pueblos, abarcando las diversas identidades, expectativas y personas que buscan una experiencia política a la altura de sus demandas”.
Iparraguirre concluyó que “este 28 somos los únicos que dejamos un mensaje sin distorsiones, sin pragmatismos y con la fuerte convicción de que la coherencia y la honestidad pueden triunfar por sobre todas las mentiras y sean un aporte significativo a frenar los intentos de restauración conservadora y nos animemos a empujar la articulación política que nos permita saltar los vallados del neoliberalismo, hermanándonos con las experiencias más avanzadas del continente, en la propuesta del Socialismo del Siglo 21.
