El crédito del Banco Mundial permitirá duplicar los planes de capacitación a desocupados

El seguro de capacitación y empleo está destinado a personas desocupadas que eligieron inscribirse en este beneficio y que previamente pertenecían al Plan Jefes y Jefas de Hogar. No debe confundirse con el seguro de desempleo que es una prestación contributiva que se cobra por un período determinado de tiempo en función de lo que el desempleado ganó cuando tenía trabajo.
Hoy el beneficio del seguro de capacitación y empleo alcanza a 84.000 personas sin trabajo y la idea es, a partir del dinero otorgado por el Banco Mundial, absorber parte de los 440.000 que todavía permanecen en el Jefes y Jefas.
A partir de este préstamo, el Ministerio de Trabajo aspira a llegar a 150.000 asegurados hacia fin de año incorporando beneficiarios del Plan Jefes y Jefas de Hogar. Además, no se descarta que se incorporen personas de otros colectivos para que reciban el seguro.
El subsecretario de Políticas de Empleo y Formación Profesional de la cartera laboral, Matías Barroetaveña, informó que el préstamo servirá además para que quienes reciban el seguro puedan incrementar el dinero percibido, según las actividades que estén dispuestos a encarar.
“Desde el 2006 se ofrece la posibilidad de elegir a los que reciben el Plan Jefes y Jefas entre el Plan Familias [dependiente del Ministerio de Desarrollo Social] o pasar al seguro de capacitación”, explicó Barroetaveña.
Quienes optaron por el seguro de capacitación tuvieron una mejora en los ingresos de 150 a 225 pesos. Pero además, una vez allí y en función de su predisposición para formarse o conseguir trabajo, se los deriva a formación o intermediación profesional, realizan prácticas calificantes en empresas, o se inclinan por la terminalidad educativa. En cualquiera de estos casos, recibirán dinero extra por encima de los 225 pesos.
“La idea es que ahora reciban otros beneficios según su rol activo. Con eso, además de los $225, tendrán $150 más por terminar la escuela u otro tanto por capacitarse”, detalló el funcionario.

BUENA SEÑAL. El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, destacó esta mañana que los créditos que el Banco Mundial otorgó a la Argentina constituyen una “buena señal de confianza” de ese organismo hacia el país.
En ese sentido, el funcionario indicó que desde el organismo “elogiaron el camino elegido por la Argentina para enfrentar la crisis” y por ese motivo aprobó la línea de préstamos, que incluye además u$s840 millones para el saneamiento de la cuenca Matanza Riachuelo.
Tomada precisó que en el ámbito de su cartera, el crédito por u$s450 millones estará “dirigido al fortalecimiento de la inserción laboral, de la inclusión social” y buscará “reforzar mecanismos de protección social, específicamente vinculado con el seguro de capacitación y empleo”.
“Este seguro no es sólo un plan social de contención, sino que tiene una actitud proactiva para insertar laboralmente a los desocupados, vincularlos a la capacitación, darle herramientas y ayudarlos en la búsqueda de un nuevo empleo”, agregó.

QUÉ ES EL SEGURO DE CAPACITACIÓN

Una de las herramientas con las que cuentan los trabajadores desempleados pasa por mejorar su nivel de capacitación. El seguro de capacitación y empleo permite a los desocupados formarse y reinsertarse en el mercado laboral. Para eso, pueden recurrir a la Red de Servicios de Empleo, que coordina el Ministerio de Trabajo, donde encontrarán una ayuda para hacerlo. La red cuenta con 212 oficinas de empleo en todo el país que son municipales, pero que están monitoreadas por la cartera laboral.
Uno de los objetivos de cada oficina de la red es generar la inserción laboral y posibilitar que se mejoren las condiciones de empleabilidad.
También se busca satisfacer las demandas específicas de las empresas de cada una de las regiones donde están las oficinas.
Además, en cada dependencia se crean espacios para derivar a los desocupados a cursos de capacitación que son financiados por el ministerio.
Una de las más grandes del país es la de Moreno, que trabaja con 354 empresas de la zona, que incluyen Moreno, Pilar, San Miguel, Morón, Merlo, San Martín y algunas empresas de construcción de capital que piden mano de obra especializada en el área (como electricista de obra o pintor de obra).

Fuente: Bae

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