Las primeras cinco detenciones en esta causa se produjeron la semana pasada: Hugo Mario Moyano, José Anselmo Appelhans, Jorge Humberto Appiani y Rosa Susana Bidinost están presos en las unidades penales 1 y 6 de Paraná; mientras que Ramón Genaro Díaz Bessone tiene prisión domiciliaria en Buenos Aires. El único que accedió a declarar ante la jueza Myiram Galizzi fue Appiani, el lunes.
En tanto, esta semana se presentaron a declarar como testigos un grupo de ex conscriptos, que brindaron detalles sobre el cautiverio de las víctimas del terrorismo de estado, coincidentes con el relato de los mismos detenidos, indicó a UNO la abogada del Registro Único de la Verdad de Entre Ríos, Marina Barbagelata.
La abogada querellante señaló “en las últimas 48 horas declararon custodios” que, entre otras cosas, contaron que quienes sufrían cautiverio estaban alojados en celdas de Comunicaciones de “un un metro por 1,80”, de las cuales “los sacaban dos veces al día encapuchados”. Estas salidas, en muchos casos tenían como destino alguno de los centros de torturas que funcionaban en Paraná, de acuerdo con las denuncias y las pruebas reunidas en la causa.
“Cuando traían o sacaban a alguien, los hacían retirar para que no observaran. Ellos escuchaban los ruidos de los autos”, amplió Barbagelata al resumir los testimonios de los soldados.
Se trata de ex conscriptos que luego de tres décadas accedieron a colaborar con la causa, pero cuyas identidades se mantienen en reserva por razones de seguridad.
Más indagatorias. Por otra parte, el coordinador del Registro Único de la Verdad, Guillermo Germano, adelantó que “se está trabajando en nuevos pedidos de indagatoria y nuevas medidas” y no descartó que incluso se soliciten nuevas imputaciones.
Además de los cinco detenidos, en esta causa están imputados por delitos de lesa humanidad Alberto Rivas, Oscar Ramón Balcaza, Luis Francisco Armocida, Daniel Manuel Rodríguez, Carlos Horacio Zapata, Julio Raúl Paredes y Oscar Ramón Obaid.
Finalmente, el ex represor Juan Carlos Ricardo Trimarco será sometido a indagatoria cuando se resuelva si es imputable o no a raíz de su estado de salud. La indagatoria a Díaz Bessone estaba prevista para el lunes 15, pero deberá reprogramarse a raíz de que ese día es feriado.