DIARIOJUNIO se comunicó con el Comandante Oyomek, Jefe del Escuadrón 4 de Gendarmería quien dijo que “Gendarmería solo cuida que el procedimiento se haga en forma normal. El procedimiento está siendo llevado a cabo por la Justicia Federal y Vialidad Nacional”. Consultado si se lleva a cabo el desmantelamiento de las estructuras del emprendimiento, dijo “no se ha tocado absolutamente nada la estructura, lo que se puede observar es que se procede a labrar actas por parte de las autoridades competentes”.
No es lo que DIARIOJUNIO pudo observar ya que se vieron obreros trabajando en el desmantelamiento del local aunque con una lentitud que sorprendía. Es que, el allanamiento comenzó poco antes de las 8 y pasadas las 9.30 hs. (momento hasta que cronistas de este diario permanecieron en el lugar), el trabajo realizado había sido insignificante. Sí pudimos averiguar y ver en el lugar, que los palos y tablas que se le sacaban al local, eran trasladados a un predio que se ubica detrás de la gran estructura montada casi sobre la ruta y conocida como Regionales María. Como se sabe, ese local está instalado sobre un terreno del Estado Nacional que ahora impide el trazado de la autovía (ver fotos publicadas aquí). A pesar de esta irregularidad absoluta, el titular e intruso, se negaba a salir de ese lugar arguyendo la cantidad de años que hacía que había instalado allí “su negocio”. Como era de prever, Vialidad Nacional le hizo saber por todos los medios que el nuevo trazado de la autovía no se podía llevar adelante mientras ese local no fuera retirado. Jorge Coduri, en rigor quien se presenta como “dueño”, no entendió razones y presentó un recurso de amparo que fue rechazado en dos instancias por lo que hoy la jueza federal de C. del Uruguay, ordenó el desalojo.
En diálogo con la prensa el abogado de Coduri (quien viajaba hacia la ciudad) dijo que por ahora no tenían pensado ninguna acción judicial, sin embargo, aclaró, “vamos a esperar que llegue Coduri, antes de decidir nada”.
El lugar intrusado por Coduri está a un costado de la Ruta 14 entre el ingreso norte a Concordia y la ex Ruta 4 por la que se ingresa a esta ciudad atravesando el corazón de la barriada noroeste.
Desde tempranas horas de la mañana, el lugar era un hervidero de periodistas de distintos medios de la ciudad que informaban sobre el esperado acontecimiento. Es que, este es un pleito incomprensible que ya lleva bastante tiempo. Tanto, que en un reciente comunicado, el Concejo Deliberante de Concordia manifestó su preocupación por la posibilidad que se detengan los trabajos de la autovía, culpa de esta situación y pidió celeridad a la justicia.
Todos entienden que este es un caso increíble, no solo porque el intruso de un predio público detuvo la continuidad de una obra de la magnitud de la Autovía del MERCOSUR, sino porque logró el apoyo de una ex senadora nacional, Laura Martínez Pass de Cresto que el intruso se encargaba de promocionar.
La ocupación de ese predio en forma ilegal y la presentación de amparos judiciales que pretendían la razonabilidad de sus planteos era permanentemente mencionado como una de las características anómicas de esta sociedad a la que le cuesta aceptar que existen leyes que hay que respetar porque son las encargadas de regular el comportamiento social en todos los planos de la vida.
Alrededor de las 11 hs. llegó al lugar intrusado y en proceso de desmantelamiento, quien se presenta como «dueño» de ese terreno del Estado Nacional. Sacado e insultando a periodistas, jueces y a quien aparecía primero en su boca, Coduri, dijo «ni siquiera me avisaron que iban a venir», «yo no le tengo miedo a nadie, ni a la gendarmería ni a la policía pero me mandan a sacar de aquí con gendarmes como si yo fuera un delincuente». Coduri, actuaba como si le asistiera la razón y con un nivel de patoterismo que lo pinta.