El gobierno advirtió sobre el “creciente aislamiento que las conducciones gremiales desaforadas están generando”. “Los miles de docentes que concurren a trabajar normalmente no lo hacen todos en respaldo a una actitud gubernamental. Lo hacen principalmente por responsabilidad y porque han advertido que los niños y jóvenes no pueden ser las víctimas de esta situación”, expresan en la nota.
En otro párrafo se señala que los docentes que no siguen dando clases “también lo hacen porque tienen razones ciertas para creer que el gobierno provincial mejorará salarios cuando las finanzas mejoren simplemente porque ya lo hizo en oportunidades anteriores”.
En otro párrafo de la nota, sostienen que “decir que el gobierno hambrea a sus trabajadores es una exageración; decir que el gobierno del gobernador Urribarri emplea métodos de la dictadura es simplemente un delirio”. Incluso sostuvieron que el delirio, “en nada afectará nunca y en ninguna circunstancia la relación de afecto, respeto y máximo compromiso del gobierno para con los docentes y para con la educación”.
Más adelante, el gobierno reiteró que “hay un mundo de cosas para avanzar con los docentes, en lo único que no podemos avanzar, por el momento, es en materia salarial”.