“Es necesaria una mayor diferenciación entre los distintos comercios salvaguardando aquellos pequeños que son de bajo volumen de actividad económica. Las sumas fijadas son un alto costo para estas actividades y no se corresponden de ninguna manera con los mínimos de facturación que puedan permitir asumir este incremento”, se señala en el correo.
“La generalización dispuesta aplicando para todos iguales esta normativa, es una expresión clara de injusticia, ya que debería haberse hecho una categorización y análisis serio de las distintas actividades comerciales de la ciudad”, añadieron las instituciones.
“Lamentamos la toma de decisiones unilaterales e inconsultas ya que, sin desconocer las atribuciones del los organismos intervinientes, consideramos que el diálogo y los consensos son posibles en la sociedad colonense y facilitaría la toma de decisiones más acordes a la realidad”, expresaron en la nota.
Asimismo, recordaron que la recaudación de toda tasa municipal debe guardar «proporcionalidad con el costo» del servicio público efectivamente prestado como contrapartida por la comuna.
En consecuencia, solicitaron racionalidad en cuanto a los aumentos y efectos sobre los costos, pensando en una situación de crisis económica porque “medidas como estas pueden tener efectos de pérdida de rentabilidad y recesión económica”.
“Ante una inflación del 7,2% informada por el INDEC, un ajuste del 200% parece ser demasiado, no desconociendo los autores del proyecto que los costos de servicios y de comercialización de ninguna manera pudieron adecuarse a la verdadera inflación (la no oficial) pues hubiese sido imposible la prestación de servicios o ventas”.
Por último, solicitaron que las medidas “tengan la coherente revisión que se hace imperativa para tan desmedido incremento, reafirmando la necesidad para la defensa del comercio local y muy especialmente para los prestadores de servicios, oficios, y pequeños comercios locales”.