El primer incendio se produjo a las 2:20 de la mañana. En un aserradero ubicado en el km. 243 de la ruta 14 estaban quemando 50 toneladas de costaneros y desechos de madera. “El fuego a esa hora estaba relativamente controlado pero los vecinos llamaron porque había un cierto viento que hacía que la llama se levante a gran altura y había viviendas cercas”, expresó Bravo.
La dotación controló la intensidad de las llamaradas y amonestó verbalmente al propietario del aserradero por provocar una quema a una distancia considerable del cuartel en caso de que el fuego se propague a una vivienda lindera. “Vamos a llegar cuando haya tomado la segunda o tercera casilla”, precisó.
Durante todo el día, distintos focos se generaron en diferentes esquinas de toda la ciudad cercanos a viviendas: Salto Uruguayo y Victorino Simón. Belgrano y Tratado del Pilar, un cañaveral en Sara Neira y las vías, Echagüe y 6 de Caballería, Sauré y 25 de Mayo, Damián P. Garat y Morrough Bernard.
“Normalmente son quemas de basura; algún cigarrillo tirado descuidadamente; alguna eliminación de corte de pasto que se amontona y lo prenden fuego. Al no tener control, esto se generaliza y terminamos teniendo incendios de importancia”, expresó. El año pasado, Bravo recordó que tres viviendas fueron abrasadas por culpa de quemas de pastizales en sus cercanías. “Hubo muertes de animales en un chiquero donde murieron unos cerditos”, expresó.