Benedetti: «Es una artimaña del Gobierno nacional para generar una recaudación adicional de 1.000 millones de dólares»

«Aunque el ministro de Economía diga que con este esquema se busca ‘asegurar la provisión de alimentos en la mesa de los argentinos a un precio adecuado en el mercado interno’, la situación real es que estas medidas van a generar una recaudación adicional de 1.000 millones de dólares que engrosará el descomunal monto que el Gobierno nacional ya maneja discrecionalmente», manifestó Benedetti.
«Este esquema de retenciones representa un duro golpe para el federalismo que tanto se pregona y levantamos como bandera en Entre Ríos. La nuestra es una de las provincias que se verá más afectada por esta medida porque aquí se industrializa muy poco de lo que se produce en el campo», advirtió el legislador oriundo de Gualeguaychú.
En tal sentido, manifestó que este nuevo esquema significa un aumento de veintiséis por ciento de lo que la provincia ya aportaba a la nación en concepto de derechos de exportación por lo que ella produce de soja. Los números son impresionantes, con los valores actuales, sobre un estimado de $ 1.890 millones que la provincia giraría de retenciones por la actual cosecha de soja el último aumento representa unos $ 490 millones adicionales.
Con las proyecciones actuales, en Entre Ríos sólo el incremento en las retenciones representa el equivalente a unas seis mil viviendas, o cuatro hospitales «del bicentenario» como el que se proyecta construir en la ciudad de Gualeguaychú.
Benedetti insistió con la necesidad de que de alguna manera la gigantesca transferencia de recursos que se genera con las retenciones vuelva a la provincia como reparación integral por los derechos de exportación que gravan a la producción agropecuaria de Entre Ríos
«El panorama de caminos intransitables, rutas destrozadas, deficiente infraestructura se vuelve inadmisible con los millones de dólares que Entre Ríos seguirá transfiriendo a la Nación en concepto de retenciones, para que a su vez el Gobierno siga manejando a su antojo a qué gobernador premia y a cuál castiga con obras, programas y planes sociales».

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