Cuenta el sitio mencionado que “al intentar acercarse al lugar en que se encontraba el pequeño accidentado, alertado por la llamada que desde el palco se hiciera a una ambulancia, Doffi fue interceptado por un policía que le indicó que no se podía tomar fotografías, algo que no está contemplado por marco legal alguno”.
Según el mismo portal, en varias oportunidades, y sin que medie razón alguna, personal policial (no todos, ya que este tipo de incidentes no se han registrado con oficiales) ha intentado impedir el accionar de fotógrafos de distintos medios de la ciudad, especialmente en accidentes de diversa índole.
Ya no se trata de pedir una distancia mínima, sino de intentar impedir que se tomen fotografías, con lo que no sólo se atenta contra el derecho a la libertad de prensa (lo cual de por sí es de una gravedad incuestionable), sino que incluso se afecta directamente los intereses de los partícipes del accidente, en la medida en que un registro fotográfico puede ser de relevancia en los casos que ameriten litigios legales”, finaliza.
