El funcionario destacó que se está elaborando un proyecto, en base a criterios nuevos, que prioriza la relocalización de las cárceles “que han quedado encriptadas dentro de la trama urbana”.
La idea es reemplazar los edificios actuales por nuevas unidades funcionalmente aptas para baja, mediana y alta seguridad, según se requiere en los cordones periurbanos de las ciudades principales.
En ese sentido, el funcionario hizo referencia a la cárcel de Gualeguaychú y a la Unidad Penal Granja El Potrerito, cuyas obras fueron recientemente adjudicadas por lo que faltaría un pabellón de alta seguridad, para disponer o para liberar el edificio de la actual cárcel.
El secretario anticipó que “procesos similares, al de Gualeguaychú se quieren adoptar para los casos de Paraná. Por lo que se reunió con el intendente José Carlos Halle y con el secretario de infraestructura municipal Tomás Arias, con quienes acordó realizar un estudio de relocalización del nuevo predio carcelario y destinar las instalaciones que queden ociosas a un emprendimiento inmobiliario y recreativo.
Una opción similar tendrán las unidades penales ubicadas en las ciudades de Concordia y Victoria.
En este último caso se concretó un encuentro con el intendente de esa localidad en el que se dialogó sobre puntos que tienen que ver con el área de obras y entre esos, el proceso que lleve a la confección de una nueva unidad en un predio que tiene la provincia que se llama El Atalaya, que permitirá aprovechar la actual cárcel para otros usos compatibles con la densidad urbana de las mediaciones.