La nota arranca destacando que Argentina debe afrontar pagos de la deuda externa por US$ 14.500 millones de dólares. “Es decir $ 45.675 millones de pesos equivalente casi al 40% del presupuesto total de la Nación; sin contar todos los pagos efectuados por la administración Kirchner y el destinado a la cancelación en efectivo al FMI de casi US$ 10.000 millones a fines del año 2005”, se señala.
En consecuencia, se prevé que parte de esta deuda se ha cancelado y se seguirá cancelando con superávit fiscal. “De lo que se desprende que ajustando los gastos y manteniendo el actual modelo agro exportador, con dólar alto, el éxito está garantizado: más reservas y la caja llena”, señala el documento.
Por lo tanto, las provincias perdieron toda “autonomía” económica para tomar las decisiones. “El tan mentado Estado Federal está solo en los Marcos Jurídicos. Los Estados provinciales en su mayoría mantienen deudas con el poder central y este actúa como disciplinador”, se destaca.
Entre Ríos “no es una isla”, sino “alumno ejemplar en la aplicación de estas políticas nacionales”. Al comienzo de un nuevo año escolar, se abren “nuevas negociaciones” (salario, infraestructura, leyes) y todas las respuestas a las demandas que plantea el gremio están orientadas hacia la Nación (Paritaria Nacional, Inversión de Infraestructura.)
Del documento se desprende que “la necesidad de cumplir con la Deuda Pública (legítima o ilegítima) hoy planteada en US$ 137.114 millones de dólares condiciona todas las negociaciones salariales de los trabajadores, los maestros venimos sufriendo sistemáticamente esta situación”.
Por lo tanto, deducen que la lógica que se impone cuando se discute el salario se explica por la ilegalidad (pagos en negro) que implica menos gastos para el gobierno porque blanquear códigos necesariamente implicaría mayor inversión.
“Es imposible pensar en otra distribución equitativa de los ingresos si los gobiernos atesoran todos los recursos que generamos, sin volcar estos excedentes en proyectos productivos y en atender las necesidades básicas de los ciudadanos”, se indica en la nota.
Por último, en el gremio señalan que “la lucha de los trabajadores entrerrianos es plantear una mejor distribución, equiparar nuestros ingresos con las necesidades reales del costo de vida; para esto es imprescindible estar unidos, para cambiar esta lógica que se nos impone y nos lleva a más pobreza”.