En marzo de este año, docentes, alumnos y padres de la escuela Nº 32 “Benito Juárez”, de Estación Yuquerí, cortaron la ruta provincial que conduce a la localidad de Federal para reclamar la construcción de una nueva escuela. El viernes, el gobernador anunció que iba a firmar esta semana el convenio para el inicio de las obras. “Nos alegró mucho la noticia cuando la recibimos en la escuela porque era la concreción de esto que veníamos pidiendo. Si bien ya estaba hecho lo de la licitación, que era un paso importante, todavía quedaba esto otro que era la firma y ahora ya tenemos fecha”, dijo Gabriela Dri, directora de EGB 3 y Polimodal.
El año pasado funcionaban tres cursos en aulas de MDF sin cielorrasos. “Eran frías en invierno porque no tenían cielorrasos, y estábamos en contacto directo con las chapas; las paredes no llegaban hasta el techo entonces corría aire por arriba; era muy dificultoso dar clases ahí”, recordó Dri.
Las autoridades tomaron nota del reclamo y refaccionaron las aulas. Se hicieron tres aulas nuevas, debajo de un tinglado. “Son aulas de material con cielorraso y un piso que se puede pisar. Son bastante cómodas, lo que no tiene es ventilador pero dentro de todo se pudieron usar”, dijo la directora
Pero la promesa era comenzar a edificar la nueva escuela. La directora señaló que había inquietud en la comunidad porque no había novedades. “Los padres se acercaban a preguntar que pasaba con la escuela; era una pregunta que cada tanto se volvía a hacer”. Las docentes volvían a realizar el “circuito de llamados”, y en cada oportunidad tenían novedades. “Lo del 29 (de junio, la apertura de sobres) fue algo que nos ayudó bastante”.
Dri explicó que: “el edificio se hace imprescindible porque la matrícula de chicos sigue creciendo, el año que viene completamos el nivel medio, si Dios quiere se abrirá el tercer año y se abrirá un aula más”.
En cuanto a la posición de la nueva escuela respecto de los cables de alta tensión, Dri dijo que el último estudio realizado reveló que no son peligrosos. “De toda manera, la escuela va a estar emplazada en el extremo opuesto a los cables”, indicó. No obstante el anuncio del viernes, muchos miembros de la comunidad educativa están esperando que comiencen las obras. “Hay alguien que me dice ‘yo quiero ver una pala por acá’”, dijo la directora.
Vecinos a los tiros
En septiembre de 2006, la provincia realizó el llamado a licitación para realizar obras complementarias y el muro perimetral en la escuela Nº 74 “J.J Valle”. Pero ya pasó más de un año y no hay novedades sobre el inicio de obra alguna. Las obras complementarias incluidas en el acto licitatorio apuntan a corregir las falencias estructurales del edificio. Hasta no hace mucho, en la escuela afloraron problemas en la estructura del edificio. “Se nos estaban deteriorando los cimientos directamente. Se estaba socavando todo el alrededor de la escuela”, recordó Galeano.
El muro perimetral se imprescindible porque hay brechas en el alambrado que se cierran pero los alumnos las abren nuevamente. “Es necesario tener un límite: un nene en un recreo se te puede ir al kiosco, un vecino con una mochila pasó cortando camino por la escuela y calculamos que era un ‘amigo de lo ajeno’, los vecinos arreglan sus temas con armas y a los tiros y la escuela queda en el medio. Somos responsables de vidas humanas, no de papeles”, dijo Galeano.
Se realizó un apuntalamiento de las paredes pero en la escuela entienden que “no es el ideal”. Además, sostienen que de esa reparación “prácticamente no queda nada”. En el ala norte del edificio, el piso está hueco porque la escuela fue edificada encima de un bañado o una vertiente. “Según los vecinos, en una semana se compactó el terreno y se pusieron los cimientos. Pero el relleno empezó a ceder, y también la estructura. Se ven en las paredes las rajaduras”, indicó Galeano.
La construcción del edificio aún está lejana porque el terreno aún no fue escriturado a nombre del CGE (Consejo General de Educación). “Según ellos nos dicen, no pueden empezar la obra porque no tienen la escritura del terreno”, indicó Galeano. El compromiso de las autoridades fue que el trámite iba a ser culminado en las pasadas vacaciones de invierno. “Lamentablemente el tiempo que nos urge a nosotros no es el de la burocracia”, dijo la docente.
A esta altura, nada las puede sorprender. La escuela aún no tiene la terminación de obra, a pesar de que fue inaugurada en mayo de 1999. “Aún no está terminado lo que el contrato decía que la escuela debía tener. El director tiene que firmar la finalización de obra junto con los arquitectos; y los arquitectos que estaban en esa sociedad, uno de ellos es fallecido”, expresó la secretaria. Luego dijo que en la Argentina: “nos estamos acostumbrando a la irregularidad”.
La secretaria recordó que el director de la Regional Noreste de Arquitectura, Ricardo Truffa, este año fue a la escuela y se entrevistó con docentes y directivos de la EGB 1 y 2, y la EGB 3 y Polimodal. Ese día les prometió que iba a encargarse de la construcción de tres aulas más para paliar la falta de espacios hasta que se construya el edificio para la escuela Media.
En la “J.J. Valle” hay preocupación por las aulas que no comienzan a edificarse. “No podemos inscribir a nadie porque no tenemos espacio físico; no podemos agregar más chicos”, explicó. Para el 2008, necesitarán abrir un 6º grado más porque sólo hay dos y tres 5º. “El año que viene necesitamos funcionar con tres 6º”, explicó. El mismo problema tiene el EGB 3: necesita un lugar para el 5º año de Polimodal que se abrirá el año próximo. Incluso, las salas de tecnología, música y plástica fueron reconvertidas en aulas. “Hay escuelas que dicen: ‘vamos al laboratorio’. Nosotros lamentablemente no contamos con eso”, señaló Galeano.
Clases en el comedor
Luis Ramón Silva, presidente de la cooperadora de la escuela provincial de nivel Medio Nº 119 “Profesor Esteban Zorraquín” (que funciona en el edificio que corresponde a la primaria Nº 8 “Madame Curie”) dijo que “en la anterior campaña electoral, el senador Héctor Strassera prometió que en el presupuesto 2007 iba a estar la partida para construir la escuela 119, cosa que nunca ocurrió”. El terreno fue adquirido en 2003 a escasa distancia de la escuela pero permanece sin modificaciones desde entonces.
También dialogaron con Adán Bhal (ministro de Gobierno y Educación) cuando estuvo en Concordia y dijo que lo va a ver. “Todos dicen lo mismo, lo mismo nos dice la gente de Arquitectura de acá, que dependen de la decisión política, en fin”, sonrió. La Cooperadora hizo todos los trámites necesarios para que el establecimiento salga, “desde hace 5 años la provincia sabe que se necesita otra escuela”.
Las condiciones en las que se dan clases en ese establecimiento no son las adecuadas: se superponen chicos de la escuela primaria con la secundaria. “Una división de la secundaria en determinado horario tiene que dar clase en el comedor, en el horario de la merienda deben desocupar el comedor para que los chicos de primaria tomen la merienda, los baños quedan chicos, tanto los de varones como de mujeres, que son pocos, están saturados”, ejemplificó Silva.
Sucede que el establecimiento fue construido para 350 chicos y hoy 800 concurren a clases, está colapsado. Fue construido cuando Enrique Tomás Cresto fue gobernador de la Provincia en 1973 para una escuela primaria. “Después le hicieron algunos injertos que deformaron toda la estructura de la escuela, pero fue para contener a los chicos que se iban incorporando, pues no hay otra escuela”. Hoy en día, dijo Silva “hay chicos que no tienen jardín de infantes ni preescolar porque no hay escuela o mejor dicho, no hay lugar físico donde colocarlos”, señaló.
La “escuelita de lata”
La comunidad educativa de la escuela Nº 34, “Esteban Echeverría”, elevó un petitorio con 600 firmas que ingresó el 2 de octubre a la Casa de Gobierno. Stella Maris Rivero, delegada docente, señaló que uno de los problemas que afrontan para edificar un edificio nuevo en el terreno que ocupan es la falta de espacio.
En consecuencia, traslucieron su interés en un terreno que pertenece a la Prefectura Naval, ubicado a dos cuadras, en Av. Castro y Gendarme Ituarte. Antes había allí un barrio habitado por efectivos de Prefectura pero fue desmontado y quedó un baldío. “A Truffa le pareció una muy buena idea y se comprometió en hacer la gestión. Estamos esperando que mañana pueda traernos alguna respuesta”, indicó.
Otro inconveniente es que la escuela se encuentra incluida en el proyecto de “Escuelas PIIE” (Programa Integral para la Igualdad Educativa). La Nación envía fondos específicos para la construcción de aulas informáticas. “Esa aula se tiene que construir antes de que se termine la gestión del gobierno nacional, en diciembre, y si se construye en el terreno donde estamos, lo van a hacer en el medio del patio y nos dejan sin patio”, señaló. Las computadoras ya estén en la escuela. Son ocho pero están guardadas y no se pueden utilizar porque, obviamente, no hay donde instalarlas.
Las docentes bautizaron a la “Esteban Echeverría” como la “escuelita de lata”. Hace 33 años la construyeron con paredes de aluminio con telgopor y techos de chapas. “Las paredes están prácticamente vencidas; las chapas no se pueden ni tocar. Subieron a arreglar las goteras y ahora se llueve más que antes porque al pisar las chapas evidentemente se abrieron”, indicó la delegada.
El objetivo inmediato de los padres es poder incluir la construcción de la escuela en el presupuesto 2008. “Queremos que las autoridades establezcan un compromiso para la gestión que viene, estamos hablando del mismo color político así que entendemos que esto no debe ser imposible sino todo lo contrario, para que la obra esté comprometida dentro del presupuesto”, señaló Rivero.
Del templo al CDI
La escuela Nº 75, “2 de Abril”, nació en un centro evangélico en construcción. “Imaginate, terminábamos de dar clases y teníamos que correr los bancos para que funcionara el templo”, recordó su directora, Mónica Olavarriaga de Schoermann. Este año, la municipalidad les prestó las instalaciones del CDI Pierresteguy, ubicado en calle Gregoria Pérez al 1428.
La escuela arrancó funcionando en Odiard y Dr. Florenza. “Nos habían dado en préstamo el local de un templo evangélico”, indicó la directora. En el recinto religioso funcionaba un jardín por la mañana y primer grado por la tarde. De noche, se retomaban las actividades de quienes profesan la fe evangélica. “Corríamos las mesas y poníamos el aula, y después sacábamos las mesas y era el templo”, dijo la directora.
Comparado con el templo, el CDI “es mucho más confortable para los niños. No es lo que corresponde pero es lo que tenemos en este momento”. Además, el templo estaba en construcción. No obstante, aunque ahora ya no deben correr las mesas, las sillas y mesas son “mucho más pequeñas” porque el mobiliario está pensado para chicos de nivel inicial.
Por otra parte, muchas veces no hay agua pero es un problema que afecta a casi todo el barrio Pierresteguy porque se encuentra en una zona elevada. “No tenemos la cantidad suficiente, se nos corta. Tenemos problemas para darles el agua a los niños así que hacemos que cada uno se traiga su botellita”, explicó la directora. En muchas ocasiones llaman a los Bomberos pero el agua que acarrean no está potabilizada.
Año a año, la escuela crece: en 2007 ya cuenta con un segundo grado, y el año próximo tendrá un tercero. “Estamos a la espera de la construcción, imaginese que con muchas ansias. Yo como directora, los docentes, sobre todo los padres porque quieren que todos sus nenes pasen a una misma escuela; de 1º hasta 6º quieren que estén con los hermanos”. La futura escuela se edificará en un terreno ubicado en la intersección de 2 de Abril y Nieves, cerca de avenida San Lorenzo. Están esperando desde febrero de este año que se realice la licitación. “Parece que los tiempos de la construcción no son los nuestros porque el año se va”, indicó.
Dirección multiuso
La escuela de nivel Medio de EGB 3 y Polimodal de la escuela Nº 9, “José María Gutiérrez”, comparte el edificio con la primaria. Fabián Pérez, director de EGB 3, dijo que la necesidad no sólo pasa por la conveniencia de separarse físicamente del ámbito de la escuela primaria, sino que además los alumnos de EGB 3 no tienen patio y sólo tienen el pasillo para distenderse en los recreos.
La escuela comenzó a funcionar en 1999 o 2000. Desde un primer momento, reclamaron la adquisición de un galpón lindero a la escuela. Pero la compra recién se pudo concretar el año pasado. En ese momento, los directivos de ambas escuelas se pusieron de acuerdo en que el galpón sea destinado a EGB 3. En consecuencia, hace pocas semanas enviaron un bosquejo a la Dirección Departamental de Escuelas donde explicitaron las necesidades áulicas de EGB 3. Además de las siete u ocho aulas, las salas de preceptores, maestros y computación, los directivos coincidieron en que el patio se destine al esparcimiento de los alumnos de ambas instituciones.
La Departamental, a su vez, debe enviar el bosquejo a la Dirección de Arquitectura de la Provincia. Pérez sabe que se viene un proceso de recambio en la administración pública, por lo tanto descuenta que el trámite insumirá un tiempo largo. Mientras tanto, urge la necesidad de encontrar un edificio propio. Pérez tiene su escritorio una habitación de usos múltiples: secretaría, preceptoría, biblioteca, depósito de limpieza, salas de computación y profesores. “Hasta había un kiosquito pero lo sacamos al pasillo”, graficó el directivo.