El crecimiento de la construcción puede beneficiar a las cooperativas de viviendas

El director de Autoconstrucción señaló que lo hecho “ha sido muy importante”. Calificó al proyecto como “muy ambicioso” porque propone atacar dos frentes simultáneamente: generar trabajo y resolver el problema de la falta de viviendas.
La municipalidad, hace dos años y medio, firmó un convenio para gestionar la construcción de 400 viviendas. El encargado señaló que 300 están prácticamente terminadas, y la semana próxima van a dejar firmado los contratos con las cooperativas por las últimas 100 del convenio. “Creemos que hemos podido cumplir con un objetivo que, cuando se dio inicio a todo esto, parecía como muy poco probable”, señaló.
Todavía queda una cuestión irresuelta: la edificación de 80 casas en el barrio “El Silencio”. “Estas viviendas vendrían a resolver el problema del asentamiento conocido como ‘El Silencio’”. Vilche explicó que no han podido comenzar porque hay un problema con la propiedad del terreno. “Es muy difícil de resolver y todavía no se ha podido arribar a una solución”, indicó. No obstante, el convenio se mantiene vigente y una vez que se resuelva, “se va a poder sumar a los convenios que viene ejecutando la municipalidad”, sostuvo.
El encargado expresó que el programa despertó interés en la comunidad, y muchas personas se han arrimado con intenciones de incrementar el número de cooperativas pero, por una cuestión presupuestaria, la Nación sólo emplea a las cooperativas que han firmado el convenio. “Eso no significa que el día de mañana la Nación no acceda a incrementar nuevamente el número de las cooperativas”, expresó.
Al principio, las cooperativas estaban conformadas por 16 integrantes, de los cuales 12 debían ser planes de Jefes y Jefas de Hogar. Si bien no ha variado la composición final, se bajó a ocho el porcentaje mínimo de beneficiarios de los planes de emergencia porque “resultaba bastante dificultoso conseguir 12 planes de Jefes y Jefas”.
En cuanto a la calidad terminación de las viviendas, Vilche dijo sentirse “muy conforme” con el nivel técnico, comparadas con las que realiza el IAPV. “Si bien es cierto que al principio a algunas les costó un poco, creo que tenemos que tener en cuenta la finalidad de esto: generar mano de obra y capacitar gente”, sostuvo.
La finalidad de quienes idearon el programa “Techo y Trabajo” es que las cooperativas pudiesen despegarse progresivamente de la tutela del estado para insertarse satisfactoriamente en el mercado de la construcción. Al respecto, el encargado de Autoconstrucción dijo que “ha costado un poco” pero hay varias cooperativas que “tienen mucho trabajo en forma particular y, de a poco, se van desentendiendo del programa original”.
Por fuera del programa “Techo y Trabajo”, Autoconstrucción pudo edificar 100 viviendas en Concordia: 60 en Benito Legerén y 40 en donde funcionaba Vialidad (Güemes e Istilarth). “Esto se hizo estrictamente por autoconstrucción, con la participación de los beneficiarios. Sabemos que la demanda es mucho mayor pero nos va indicando un camino por donde pasa la solución para las viviendas de interés social”, indicó.

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