Desde el Mercado Central señalaron que, ayer, el cajón se vendía a 100 pesos. Así, el kilo de tomate redondo de primera calidad cotizaba a 5,06 y el perita se vendía a 5,13. La rebaja apenas comenzó a notarse en las verdulerías. La pregunta que surge es porqué en las góndolas costaba menos de un tercio de los valores del mercado mayorista. ¿Dos terceras partes del precio son flete y otros costos internos y la cadena está perdiendo dinero en estos momentos, o había un sobrecosto especulativo mayúsculo?
En tanto, según informó hoy Clarín, las ventas bajaron 40% a causa de esta medida. La semana pasada, el kilo de tomates llegó a venderse a 18 pesos, en medio de la escasez del producto por las heladas que afectaron las cosechas.
El fin de semana, el boicot sumó la adhesión de las asociaciones consumidores, que propusieron no se compre el producto de aquí hasta el viernes. «El llamado a boicot comenzó a tener efecto, porque en el Mercado Central bajó hoy (por ayer) el precio del tomate 30%. Y empezó a aumentar la oferta, ya que la semana pasada no se conseguía», explicó en conferencia de prensa Susana Andrada, titular del Centro de Educación al Consumidor (CEC).