La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) repudió la decisión del Consejo General de Educación (CGE) de emitir una comunicación por la cual exige a los directivos y docentes a informar a sus alumnos si adhieren a las medidas de fuerza. El secretario general del gremio, Sergio Elizar, sostuvo que esta orden “no corresponde, es totalmente arbitraria y fuera de la legalidad” y que “le da mayor crispación al conflicto”.
En tanto, sostuvo que “todo el mundo habla sobre pavadas, o sea que si esto genera una discusión es lo más absurdo y estúpido que puede haber”, resaltó.
“Lo que hice el 11 de septiembre, fue enviar a las direcciones departamentales una nota en la cual les pedía a los directivos que soliciten a los docentes que le anuncien a los padres si iban a estar en la escuela o no, para que el papá sepa qué hacer”, indicó Kerz. Y comentó que “ha habido caso de chicos de 7 años que fueron a la escuela y terminaron paseando en la peatonal, y casos de maestros que esperaron a los alumnos y los padres no los mandaron”.
El titular del CGE manifestó que “en cumplimiento de una sentencia de un juez que obliga al Estado a garantizar el derecho a la educación, di esa recomendación. No tiene otra connotación, cualquiera que hable otra cosa es porque tiene ganas o porque no leyó lo que tenía que leer”, aseveró.
