Los funcionarios judiciales recorrieron por espacio de una hora el edificio destinado a alojar a los detenidos sin condena. Luego de dialogar con Córdoba, ninguno de los dos inexplicablemente quiso hacer una nota y una solo prefirió deslizar, off the record, algunos comentarios al cronista mientras manifestaba sin disimulos sus deseos de irse de inmediato. “Ya está todo solucionado”, expresó.
Entre las pocas cosas que mencionó es que hay un problema de presupuesto cuya solución estaba en camino. “No quieren comer sobras”, indicó en referencia a los detenidos.
En cambio, una fuente policial fue más explícita. “Lo que pasa es que a veces el móvil que trae la comida se retrasa porque está con otras tareas. Y un fideo que a las 12:15 está listo, a las dos de la tarde está recocido”, indicó. En definitiva, el menú de ayer -fideos apelmazados- fue el inconveniente.
El policía ratificó que hay un problema de presupuesto. “No hay partidas disponibles para que coman los detenidos que tenemos acá y en la Jefatura. Ellos están comiendo la misma comida que los policías. Entonces tenés que hacer que de un presupuesto para 20 coman 40”, señaló.
Durante los escasos minutos que la fuente judicial dialogó con la prensa, también señaló que había un problema de “higiene” pero que ya había sido solucionado. Nuevamente, desde la policía brindaron mayores detalles. “El problema es que prendían el termotanque pero el agua no llegaba al baño porque las cañerías estaban obstruidas”, indicó. Pero el problema ya fue solucionado hace algunos días. El edificio es compartido entre la Comisaría 4º, el Comando Radioeléctrico, y antes funcionaba allí la Escuela de Agentes y la Comisaría del Menor y la Familia.
En realidad, los uniformados señalan que muchos de los problemas en el baño son ocasionados por los mismos reclusos. “Algunos tiran de todo en los inodoros. Una vez sacaron flotantes y boyas; dos por tres echan yerba y así se tapa todo”, dijo la fuente. Es más, hubo un recluso que, al enterarse que iba a ser trasladado a la UP3, partió un inodoro al medio.
La mayoría de los detenidos en la Alcaldía son aquellos que están procesados y no tienen condena. Muchos eran alojados en la Jefatura pero, debido a que de seis celdas quedaron nada más que dos porque las restantes fueron transformadas en oficinas, debieron ser trasladados allí. En la Jefatura sólo hay alojamiento para los contraventores pero si se desborda la capacidad de la Alcaldía (16 máximo) se los envía de vuelta a la Jefatura. En el edificio que está contiguo a la Comisaría 4º también se alojan a quienes tienen algún problema de convivencia en el Penal, como los condenados por violación.
