Lo primero que quedó en claro es que la carta que enviaron a las autoridades para impedir el bloqueo no cambió nada. El segundo comandante del Escuadrón Nº 4 de Gendarmería, Víctor Gerez, anunció que “tienen ordenes de no criminalizar la protesta social”. En consecuencia, quedaba una sola opción: la acción directa.
Durante el mitin, varios oradores mencionaron que mañana vendrán numerosos asambleístas de Gualeguaychú para apoyar el piquete y ese fue un factor disuasorio. Oscar Sorokin, propietario de una librería, dijo que Gerez le expresó que iba a venir “bastante gente de Gualeguaychú”. Aunque no obró de igual manera para todos porque el moderador de la asamblea, Rubén Salomone, lo utilizó para generar ánimo de concurrencia: “creo que no nos gustaría que venga gente de afuera a meterse en nuestro patio a hacer lo que quiera así como nosotros no lo hacemos”, dijo.
Luego de que se impusiera a mano alzada por dos votos (27 a 25) por ir al puente a impedir que se bloquee el tránsito, Sorokin notó que no había fuerza ni entusiasmo en la convocatoria y dijo que no podían ir 25 personas a mostrar “debilidad” frente a los asambleístas. La sugerencia fue tomada en cuenta.
Resuelta la cuestión más importante, surgió en su reemplazo una moción que fue aprobada consistente en hacer una denuncia en el Juzgado de Concepción del Uruguay. “Aquellos que estén en condiciones, ponemos un día de la semana para ir y es un punto más para sumar a esta lucha”, sostuvo Salomone.
Una de las referencias más visibles es el presidente del Centro de Industria y Comercio, Roberto Niez. En un párrafo de su discurso, les endilgó “falta de ideas” a los asambleístas. “El tema de esta chica Carrozzo protestando a los presidentes fue muy buena idea y no molestaron prácticamente a nadie. Creo que habría que proponer un concurso de ideas para ver de que manera podemos protestar de forma pacífica”, expresó.
Lo que sí afloró en varias oportunidades -a pesar de que algunos proponían acentuar las coincidencias y no las diferencias- fueron las contradicciones entre los asambleístas, a veces insalvables. El más crudo contraste fue el cruce entre un orador que propuso “llevar una ofrenda floral a la Gendarmería que mañana es el quincuagésimo aniversario de su fundación. Un arma que ha defendido nuestras fronteras en todo lugar inhóspito del norte y del sur”, y Sorokin quien dijo que esa propuesta desvirtuaba la convocatoria y que Gendarmería está involucrada directamente en los hechos represivos de la última dictadura. Sin perder el tiempo, el primer orador abandonó la plaza.
Sorokin, al igual que otros asambleístas, quiere que se desprenda el rótulo de comerciantes antipiqueteros. “Que no quede en una cuestión de caja, como se le quiere atribuir desde cierto periodismo, porque se quiere perder este movimiento anti-corte”. Minutos más tarde, otro orador exhortó a los comerciantes a “sacarse las caretas porque comerciar no es contrabandear”. Mencionó a los autos uruguayos que son atiborrados de nafta en botellas plásticas convirtiéndose en potenciales bombas incendiarias. Si bien la mayoría de los oradores eran aplaudidos, las palmas hicieron silencio al terminar su alocución.
El jueves de la semana que viene, la asamblea anti-corte se reunirá a las 11:30. De cualquier forma, Niez avisó que si algún concordiense o salteño necesita cruzar por el puente a la hora del corte, que avise a quienes estaban presentes para concurrir con una escribana. “Veremos si conseguimos un escribano y lo hacemos pasar”, indicó.