Cabe señalar que luego de conocer la postergación del juicio por la desaparición de Fernanda Aguirre, Iparraguirre –quien es el defensor de uno de los imputados en la causa, Raúl Monzón– apuntó contra el mandatario entrerriano al acusarlo de “manipular la justicia”.
Iparraguirre dijo ahora que “los entrerrianos se deben preguntar qué es lo que pretendía Busti; yo estoy absolutamente seguro que no era encontrar a Fernanda Aguirre, eso nunca estuvo en su voluntad”.
Subiendo la apuesta al afirmar: “Yo trato con personas de bien. Lo que hagan las personas que no son de bien no me merece ni el más mínimo de los respetos, ni él ni su vocero en la causa”, declaró el abogado, en tanto tildó al Gobernador de “un tipo que tiene el tupé de presionar a los jueces seis días antes del inicio de la causa”.
Además, aseguró que no tiene intenciones de rectificar sus dichos. “Me puedo rectificar por errores que puedo cometer con personas de bien, pero no con personas que no merecen el más mínimo respeto”, afirmó al respecto.
Injerencia del poder político
Por otro lado, Iparraguirre entendió que Busti “tiene que explicar por qué presionó al presidente de la Sala que debía juzgar a Fernanda Aguirre a seis días de que se inicie la causa (en referencia a Felipe Celli). Es absolutamente evidente que algo ha estado ocultando durante este tiempo y debería dar respuesta a eso”.
A su vez, reflexionó: “Queda en absoluta evidencia la grosera injerencia del poder político en la causa Fernanda. Me parece que esto no es casual, tiene que ver con todos los desmanes que hubo a lo largo de la investigación por parte de los funcionarios policiales actuantes. Además, con la participación directa de Busti, que en su momento se reunía clandestinamente con (Mirta) Chávez (acusada en la causa) en la unidad penal Nº 6 de Paraná, negando esa circunstancia. Y ahora, con la denuncia hecha pública por Celli”.
En ese sentido, opinó que “estamos frente a una situación de deterioro institucional gigantesca, en la cual se ha roto la partición de poderes. El Poder Ejecutivo maneja a diestra y siniestra al Poder Judicial y no hay ningún tipo de garantías de que haya un proceso justo. No existe una república, una partición de poderes en la provincia. Existe un tirano que sin ningún tipo de pudor puede presionar jueces, testigos, ofrecer dádivas, cooptar a los familiares, mandar a amenazar”, enumeró.
“Me parece claro cuál ha sido la actitud de Busti frente a esta causa. A esta altura claramente está ocultando algo y debería explicarlo. Si en manos de alguien está la seguridad de los entrerrianos, es en las del gobernador. Y parece que no estamos en muy buenas manos”, acentuó.