El proyecto de ley por el que la provincia adhiere a a ley nacional de biocombustibles pasó a la Comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados. En el Senado, el oficialismo y la UCR la aprobaron sobre tablas. El senador Majul, sugirió entonces revisar su contenido por la trascendencia de la norma .Ahora, Greenpace advierte que la producción de biocombustibles podría terminar con los bosques nativos del Noroeste y Noreste de Argentina.
El 11 de La Cámara de Senadores aprobó sobre tablas, un proyecto de ley del senador Héctor Strassera (PJ- Concordia) por el que la provincia adhería a la ley nacional 26.093 de promoción y desarrollo de biocombustibles. La iniciativa fue aprobada por el oficialismo y la UCR.
Julio Majul, en tanto la cuestionó y fundamentó su «rechazo» al tratamiento de temas tan importantes «sin verlos nuevamente en la comisión».
Majul avisó, en esa sesión, que esa ley podía «tener derivaciones no sólo económicas sino también ecológicas» y propuso estudiarlo nuevamente en la comisión para analizar «si conviene apoyar toda la ley o una parte» de ella.
Para Strassera, en cambio, y de acuerdo a lo fundamentado en esa ocasión, el proyecto cobijaría a «pequeñas y grandes empresas» que encontrarán en el biodiesel una alternativa con menores costos y calificó como «trascendental» su aprobación por las implicancias «ambientales, sociales y económicas» que traería aparejada su aplicación.
Greenpeace presentó un informe titulado “Bioenergía: potenciales y riesgos” (el informe puede leerse completo en el artículo “Teléfono para Urribarri: Cada vez más cuestionada la producción de biocombustibles…” publicado ayer en DIARIOJUNIO) que observa múltiples efectos de la producción de biocombustibles. Ahora, resta saber cuál será el dictamen de la Comisión de Legislación General de Diputados y en caso de que se convierta en ley, si la provincia está en condiciones de rebatir el terrible diagnóstico que ofrece Greenpace.