Mónica González, una docente de la institución, comentó que en la escuela le pidieron a la empresa tras días para acomodarse. Por lo tanto, desde hoy y hasta el viernes dictarán clases en forma normal. “Cada uno en su turno, con sus respectivos horarios”, comentó.
La empresa trabaja en el ala izquierda de la escuela. Sólo resta cambiar los techos de tejas por chapas en dos aulas. “Está bien delimitada por el riesgo por los chicos”, indicó. En el ala derecha, los albañiles aún no trabajaron porque quedó para una segunda etapa.
“La próxima semana se verá en que forma van a trabajar y organizarnos para ver como vamos a hacer con el ala derecha”, indicó la docente. La constructora debería avanzar de a dos aulas y se suspenderían las clases un solo día, cuando deben abrir canales en la pared con una amoladora. “Se imposibilita por el ruido y el polvillo que es muchísimo”, precisó
“Nosotros lo vemos como positivo porque se está arreglando la escuela”, dijo. En cuanto a la actitud de los padres, González señaló que “hay algunos que relinchan y otros que no, pero terminan entendiendo cuál es la situación”.