“El hecho que se generalice de esa manera nos está metiendo a todos en una bolsa que no me parece prudente porque realmente no es así”, dijo Mover. En cambio, opinó que una posible lectura de las declaraciones es que la distribución responde a parámetros que desconoce. “A vos te voy a dar y a los otros no les puedo dar’ por razones que no son generales”, dijo.
El préstamo que mencionó Mover está dirigido a los productores nucleados en la Cámara de Exportadores para construir una fábrica para hacer jugo. La Federación del Citrus también trabaja en la posibilidad de concretar una fábrica que sea propiedad de los productores a través de una cooperativa. Pero tuvieron dificultades para encontrar un aval. “El mismo presidente de la Cámara de Diputados nos dice que el dinero estaba pero que nosotros necesitábamos un aval que en definitiva no teníamos”, dijo Mover. La ilusión de los productores era que la Provincia pueda ser garantizar el dinero que necesitan para llevar adelante la fábrica.
“La idea nuestra era de que a través de una cooperativa nosotros podíamos ir nucleando a todos los productores y a su vez ir formando una cultura asociativa a la que nos parecía que nos está faltando”. Pero entiende que las declaraciones de Welschen “dejan por ahí de lado las ilusiones que teníamos en llegar a algo que sea de los productores y para los productores”.
El presidente de la Federación expresó que han logrado beneficios del gobierno de la Provincia que los debe destacar. “Fuera de esta declaración, Welschen nos viene acompañando de una manera espectacular, tanto en los recursos que nos han brindado como en el acompañamiento que vienen haciendo en las gestiones a nivel nacional”. Incluso, dijo que el apoyo era “inusual” y que están “agradecidos”. Sin embargo, remarcó nuevamente que no veía “igualdad de condiciones” para toda la citricultura.
Mover dijo que no se desvanece la posibilidad de poder montar una fábrica. “La ilusión la vamos a seguir teniendo, me parece que es lo más equitativo, lo más razonable”, sostuvo. Aunque reconoció la existencia de tres fábricas de jugo en Concordia, que veces se saturan de materia prima y a veces les falta, indicó que sería diferente tener una fábrica propia por dos razones.
En primer lugar estaría ubicada en el norte entrerriano. “Es un lugar equidistante a los lugares donde hoy la citricultura está incrementándose”, acotó. De esta forma, los productores de Villa Del Rosario y Chajarí se ahorran un flete de 100 km. En segundo lugar, y más importante aún, el asociado participa de las ganancias de la empresa. “El productor obtiene un precio mínimo en su momento y a fin de año se hace un balance y las ganancias se redistribuyen o reinvertirlas en algo que nos vaya dando beneficios con algún subproducto”, señaló.
Mover indicó que el proyecto no había trascendido hasta el momento porque preferían ser cautelosos. “Lo veníamos trayendo en un perfil bajo con la esperanza. Es un desafío, tampoco podemos hacer cosas improvisadas y llegar a publicar algo que por ahí quedábamos en offside”. Incluso, señaló que estuvieron reunidos con representantes de algunas de las tecnologías que podrían ser las que se aplicarían.
Respecto de otro préstamo otorgado en diciembre pasado para realizar una limpieza de cancrosis de algunos lotes. “Ahí también me parece que no hay igualdad de condiciones para todos los que por ahí necesitaban hacer ese trabajo”, dijo Mover. A diferencia de la Cámara, que distribuye los beneficios entre todos sus asociados, la Federación tiene como objetivo el reparto entre todos los productores citrícolas.