Luego del accidente los pasajeros mostraron su enojo al chofer, quien manifestó no tener la culpa de lo ocurrido.
Muy enojados los pasajeros que viajaban en el momento que al colectivo se le desprendió el rodamiento, manifestaron que están cansados de reclamar pero nadie hace nada para mejorar medianamente. A estos dichos los vecinos también sumaron su protesta por que es de uso obligado y en el mejor de los casos ni siquiera cumplen con los horarios preestablecidos.
Del hecho se puede interpretar que pudo haber ocasionado una tragedia si se hubiera producido en una avenida como Eva Perón. Esta serie de averías en los viejos coches no hacen más brindar un alto grado de inseguridad a los pasajeros que en las horas picos muchos de ellos son escolares.