En el marco de una conferencia de prensa que se realizó hoy a las 13 en la sede del Registro Único de la Verdad, Leandro Ruiz Díaz, el hijo de Eva Sánchez, denunció que sufrió acciones intimidatorias el miércoles 8 de noviembre alrededor de las 23.30, en las inmediaciones de la rotonda entre San Martín, Av. Galán y la Av. Ejército y sostuvo que mantuvo el hecho en secreto para no preocupar a su madre, hermana del militante asesinado en 1975, Ramón Héctor Pichón Sánchez.
“Me persiguieron en un auto y me apuntaron con los dedos en forma de arma”, señaló el joven quien especificó que fue seguido varias cuadras por un vehículo Volskwagen Gol modelo 1990/1994, color azul oscuro de vidrios polarizados, desde el cual sujetos masculinos no identificados lo amenazaron gestualmente.
En ese marco, la militante de los Derechos Humanos, María Luz Piérola, quien también se encontraba presente en la conferencia destacó que el hecho “se relaciona con las intimidaciones que sufrí el 9 de noviembre en la misma zona de la ciudad” y agregó que “la idea es intentar aislar a todos los grupos vinculados con estos hechos para que el miedo no siga tapando lo que sucede”.
Asimismo, el coordinador del Registro Único de la Verdad, Guillermo Germano repudió lo sucedido y manifestó que la sumatoria de intimidaciones de los últimos tiempos se enmarca en lo acaecido tras la desaparición de Julio López, el testigo clave en el juicio contra el represor condenado por genocidio, Miguel Etchecolatz.
Por su parte, la abogada Marina Barbagelata explicó que la denuncia se radicó en el Juzgado Ordinario en turno, pues el caso de Ruiz Díaz tiene características procesales diferentes de las que reviste la causa de María Luz Piérola, cuya denuncia se radicó en el Juzgado Federal.
Eva, la madre del joven, no dejó de mostrar su nerviosismo ante los sucesos de los cuales fue víctima su hijo, pero señaló, no obstante que la situación no logrará generarle miedo porque “pase lo que pase no me van a hacer callar”.
Desde el Registro Único de la Verdad, AFADER e H.IJ.O.S. Regional Paraná repudiaron “profundamente” lo sucedido a familiares y militantes de organismos de Derechos Humanos. A ello se sumó la adhesión de la Agrupación 20 de Diciembre, de la Facultad de Ciencias de la Educación.
