Esta movida se realiza por cuarto año consecutivo de las mano de MOMO, una agrupación donde se nuclean distintos grupos carnavaleros, y esta edición ya había comenzado el lunes 27 de febrero en la Plaza Urquiza con talleres abiertos de murga y candombe.
La idea era que al día siguiente y tal como se realizó los tres años anteriores, se desfilara desde esa misma plaza hasta la plaza 25 de mayo por calle Urquiza. No obstante la lluvia impidió esta celebración.
Cabe destacar que además de las inclemencias del clima también las hubo por parte del municipio, ya que por distintas vías se hizo saber a los impulsores del festejo la disconformidad con que se corte la calle, incluso se llegó a ofrecer el Corsódromo para realizar el desfile.
De más está decir que esta posibilidad fue descartada de plano toda vez que el espíritu de este festejo estimula a que lo que se entiende como público se sume a los festejos, cosa que ocurrió plenamente ayer en la Costanera.
Cabe recordar que además del rescate del festejo durante los días de carnaval, desde MOMO también se impulsa el retorno de los feriados para esa fecha y la declaración de las murgas como patrimonio cultural de la ciudad.
Las agrupaciones que participaron ayer en la Costanera fueron la “TTB” (Tururú Tinto Band), “Los Guapos de San Miguel”, “Los Galanes de la Cantera”, “La Santa Murga”, “Estrella Amarilla”, “Luz de Luna” y una agrupación de barrio Cabildo San Antonio, además de la gente que se fue sumando al ritmo del bombo platillo y se fue a su casa con el recuerdo de una tarde de domingo no tan gris como de costumbre.