Fabre salió así, al cruce de las declaraciones formuladas por el ex titular de la Secretaria de Salud, Alberto Rotman, a DIARIOJUNIO, respecto al proyecto de la Fábrica de Medicamentos de Federal, en las que sugirió “una supuesta connivencia entre el comercio privado de venta de medicamentos y el Estado”.
“Es una barbaridad lo que ha dicho Rotman, en todo caso, serán los ex funcionarios de la gestión de Sergio Montiel, quienes tendrán que demostrar ante la Justicia que no hubo connivencia entre ellos y los adjudicatarios de las licitaciones para la compra de equipamiento para la fábrica de medicamentos por un millón de pesos”, respondió Fabre. Y acotó que el ex funcionario habla sobre un proyecto que implementó su gestión de gobierno, sin conocerlo “como lo reconoce en sus declaraciones periodísticas, porque de lo contrario no podría afirmar que la gestión de Montiel no haya comprometido 22 millones de pesos, porque esto consta en los documentos firmados con el Programa de las Naciones Unidad para el Desarrollo (PNUD), dentro del cual se enmarca el proyecto de la fábrica de medicamentos.
Sobre este tema, la Oficina Anticorrupción (OA), presentó una denuncia penal contra los ex responsables de la Fábrica, el ex titular de la UEP, Carlos Aranguren y el ex director del FINVER, Elio Demartini, por presuntas irregularidades en la implementación de la Fábrica de Medicamentos de Federal, enmarcada en el Programa de las Naciones Unidas (PNUD). De acuerdo a la presentación, las conductas de los ex funcionarios podrían quedar encuadradas en los delitos de fraude en perjuicio a la administración pública y defraudación por abuso de confianza.
Rotman afirmó que según las proyecciones con las que contaban los ex funcionarios , a mediados del 2004, se deberían haber estado fabricando mas de 40 genéricos. Al respecto, Fabre afirmó que “es una mentira ya que un mes antes de terminar la gestión, en noviembre de 2003 se realizaron los procesos licitatorios, actualmente observados por la Contaduría de la Provincia, el Tribunal de Cuentas y Fiscalía de Estado, organismos constitucionales de contralor”.
Por otra parte, el titular de la UEP, señaló que el edificio en donde iba a funcionar la fábrica estaba a medio construir, y además el proyecto contenía serias falencias que fueron observadas por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT), organismo encargado del control, fiscalización y vigilancia de la sanidad y calidad de los productos, procesos, tecnologías y materiales que se consumen o utilizan en medicina, alimentación y cosmética humanas, en todo el país.
Entre las graves anomalías detectadas tanto por la Contaduría de la Provincia, como por el Tribunal de Cuentas en los procedimientos para la compra del equipamiento, se señala que en primer lugar se habría comprometido a la Provincia en la suma de 22 millones de pesos, sin contarse con las previsiones presupuestarias pertinentes, en clara violación a la Ley de Contabilidad de la Provincia 5.140. Además de otra serie de observaciones violatorias de la normativa que regía las compras, por ejemplo: falta de notificación de adjudicaciones; falta de cuadros comparativos; falta de garantías de cumplimiento contractual; falta de constancias de la adquisición de pliegos por parte de los oferentes, siendo requisito necesario para adquirir tal calidad.