Los fundamentos del proyecto de resolución establecen que “sólo existen dos aparatos en esta ciudad pero sólo uno funciona”. Además asegura que el cáncer de mamas “es el más frecuente en las mujeres, existe (sic) 18.000 casos anuales en la Argentina y en el 98 % de los casos es curable, si se realizan los controles adecuados”, y que a nivel mundial “provocan más de 300.000 muertes anuales”.
Además hace hincapié en que el único aparato que funciona en Concordia “no cubre las demandas y muchas veces estos estudios se tienen que derivar a otras ciudades lo que genera mayores costos y pérdidas de tiempo innecesarias y perjudiciales para el diagnóstico y posterior tratamiento”.
El proyecto también hace referencia a que “los pacientes que no pueden viajar, deben esperar meses para obtener un turno y poder hacerse el estudio lo que puede agravar severamente su situación”.
“Los edificios no curan a nadie”
“Es un indicio de que la salud se ha tomado en joda en la provincia”, expresó, al finalizar la sesión, Chabrillón. “Estamos inaugurando cosas extravagantes, hospitales de altísima complejidad que evidentemente están vacíos de estructura”, agregó. “La salud no se mejora inaugurando edificios sino equipando con recursos materiales y humanos. Los edificios no curan a nadie”, sentenció.
Por otra parte, al analizar el proyecto de Galli, señaló que al mamógrafo “hay que usarlo, manejarlo. Hace falta que haya un especialista de diagnóstico por imágenes que genere los diagnósticos y haga las indicaciones necesarias”.
Esta observación le sirvió de base para señalar que “es absurdo sólo comprar un aparato. Lo que hay que aumentar son los recursos humanos del hospital en las áreas de diagnóstico, sobre todo de diagnóstico por imágenes. Comprando un aparato no se resuelve el problema”. El concejal aseguró que, sin el especialista, el aparato se convierte “en una ostentación de un bienestar que no existe”.
Por otra parte, indicó que los sueldos que se pagan en salud pública “no justifican que ningún profesional venga a radicarse a Concordia. No va a venir ningún especialista por $ 400, $ 500 o $ 600, que es lo que gana un médico en un hospital”.
Chabrillón, en el único aspecto que coincidió con la edil justicialista, es que un solo mamógrafo es insuficiente para atender la población femenina de Concordia. “Se necesitan varios más”, afirmó.