El ex tesorero, quien se encuentra desde el miércoles alojado en la Jefatura Departamental de Policía, podrá declarar o abstenerse. Trascendió que, teniendo en cuenta la gravedad de los cargos por los cuales lo imputaría Cadenas, Giménez haría uso del derecho a abstenerse.
Por su parte, el intendente Daniel Irigoyen solicitó formalmente la intervención del Tribunal de Cuentas de la provincia. Incluso, el Concejo Deliberante ayer aprobó por unanimidad una ordenanza mediante la cual se crea una auditoria externa y una comisión ad-hoc, la que tendrá el objetivo de llevar a cabo un análisis sobre los movimientos en la Tesorería Municipal. La comisión ad-hoc estará integrada por un concejal de cada uno de los bloques para acompañar a la Auditoría (a través del Colegio de Graduados de Ciencias Económicas).
El edil del partido justicialista solicitó en el debate en el recinto del Concejo la interpelación del Intendente, el Secretario de Hacienda y del Contador de la Municipalidad, “quedando en claro dar la formalidad que el caso requiere de acuerdo a la reglamentación vigente”.
Por otra parte, el secretario de Hacienda, Néstor Pérez, en diálogo con LT 41, en relación al “millón de pesos que trajo Pemo Guastavino”, dijo que “se tenía que depositar en una cuenta específica para gastos de Obras Sanitarias pero fue depositado en otra cuenta donde él sacaba dinero y para cubrir todos estos ilícitos. Cuando me llegaban los balancetes (saldos de los bancos) me figuraba que ese millón estaba en esa cuenta y yo estaba tranquilo. Pero en los balancetes firmados -documentos que tengo yo- me fraguaban los saldos de los bancos”.
Manifestó que “el intendente tiene mi renuncia a su disposición, no tengo problemas en irme en cualquier momento porque yo no vivo de la política, tengo mis negocios particulares pero sí quiero que se aclare porque me quiero ir con la frente bien alta como vine a la municipalidad”.