El titular de la FECIER fundamentó que el los citricultores querían “conocer como iban a surgir estas inspecciones”. Explicando que desde el estado “dicen que el criterio que nosotros pedimos lo van a tener en cuenta, pero necesitan que el productor los reciba”.
En otro sentido, y en relación a las inspecciones sanitarias, Mover informó que a partir del 11 de julio llegarán auditores de la Unión Europea. “Los controles se están haciendo como el Senasa tiene que hacerlo y venimos acatando las ordenes para tener las cosas en las mejores condiciones y poder recibir esa auditoria de la forma que nos permita continuar exportando hacia esos países”, señaló.
Sin embargo “cada día se suman problemas, como ahora los climáticos”, advirtió, como la lluvia, el granizo, o la gran humedad y el calor, además de lo que sucede con el mercado interno, donde “los precios son irrisorios y no se vende”.
“No vamos a bajar los brazos pero no es fácil continuar cuando tenes tantas adversidades”, reflexionó, por lo que “necesitamos el apoyo de todos para que este sector continúe, teniendo en cuenta la importancia que tiene en nuestra región”, concluyó el productor.