En la noche del lunes pasado, en oportunidad de presentarse el proyecto de construcción de una nueva pileta en el complejo termal, pesó la ausencia de los concejales. Se supo después que no habían sido invitados e incluso que desconocían el proyecto en cuestión. Esto fue admitido por Garay, aunque restó importancia a la circunstancia, calificando de error protocolar el que no haya sido invitado el presidente del Concejo, pero aseguró que «tenemos absoluta confianza y diálogo con el Ejecutivo y no sentimos que tengamos cerradas las puertas». Apuntó además que «aún no tenemos nada oficial de ese proyecto, pero eso no significa que se vaya a pasar por encima el debate en el Concejo», apuntó.